El Blastfest se presentó en su primera edición el día 20 de octubre en Palermo Club, aunque el lugar no es destinado para conciertos porque funciona más como un lugar de fiesta, el sonido y la capacidad de bandas importantes pero sin tanto público fan, es ideal para que bandas de peso como The Amity Affliction se hayan presentado aca. En esta ocasión Septicflesh y Fleshgod Apocalypse son dos de las bandas más representativas europeas del metal extremo, y fueron parte del cartel internacional acompañados de Mortuorial Eclipse y Lepergod por la cuota nacional.
Mortuorial Eclipse fue la primera banda que se presentó en el festival, los cordobeses dieron lección de metal pesado, black muy oscuro y con mucha energía para el espectador. Una inspiración para los amantes del género extremo nacional. Quince minutos después subió a escena Lepergod, liderados por Rodrigo “Thav” Sánchez (Voz y Guitarra) que mostró una actitud poderosa, jugando con el publico entre termino de cada canción. En lo musical se vió una banda fuerte, llamativa y con un Death/Black violento y sangriento. Interpretaron canciones como “La Cruz Traidora”, “Diatriba Infernal”, “himno a sachayoj”, entre otras e invitaron a la presentación de su LP “Siniestro Extasis” el próximo 24 de noviembre en Club V.
El público estaba emocionado pero también molesto por los horarios establecidos, existieron demoras de más de treinta minutos para que salieran las bandas principales. Sin embargo, Fleshgod Apocalypse se presentó con toda la emoción y la tradición italiana del Black Metal haciendo parte de su gira KING. Aunque la banda pasó por momentos de cambio, los actuales artistas se hicieron notar, Tommaso Riccardi en la voz principal y guitarra rítmica, Cristiano Trionfera en la guitarra líder y coros, Francesco Ferrini en los pianos, Paolo Rossi en el bajo y voz melódica, el baterista Francesco Paoli y Veronica Bordacchini en la voz de ópera.
La primera en salir fue la corista Veronica Bordacchini, con un traje victoriano con máscara cubriendo su rostro, y así sucesivamente cada uno de los integrantes de la banda vestidos elegantes y con maquillaje oscuro mientras que sonaba de fondo “Marche Royale”, decidieron arrancan con “In Aeternum”, pieza que hizo emocionar a los fans que se hicieron sentir. La mezcla de la iluminación con los trajes y sus maquillajes dark permitieron que el clásico Death Metal Sinfónico se mostrará explícito y teatral, tanto así, le dieron fuerza a temas importantes como “The Violation”, “The Fool”, “Gravity” hasta el tema final que fue “Syphilis”.
A las once horas menos quince minutos sale Septicflesh al escenario con buena entrega para el público argentino, es la primera experiencia que tuvieron los griegos con los participes sudamericanos. El bajista y cantante Spiros Antoniou fue el encargado de elevar la tensión del público para que hiciera fiesta y pogo con temas como “War in Heaven”, “Martyr”, “The Vampire from Nazareth” entre otras. Lo bueno de la banda es que no decayó, su death metal fue brutal y sucio. Algo que hizo que los amantes del genero se sintieran identificados. El austriaco Kerim “Krimh” Lechner fue un guerrero con su instrumento, y cada integrante de la banda hizo sentir feliz al público nacional.
“Unbeliever”, “Persepolis” y fueron algunas de las canciones que estuvieron en el show, pero la que dejo sorprendido a los presentes fue “Anubis”, tema pedido desde la primera canción interpretada, Spiros decide pedir que acompañaran a la banda con una introducción oscura y mística, antes de hacer un homenaje a Grecia, su país natal “Prometheus” siendo así, la canción que cerró el recital.
En conclusión, el BlastFest fue aceptado por los argentinos, un espectáculo digno y oscuro, con bandas de talla y que tendrá la oportunidad de generar confianza año a año para ser uno de los festivales más importantes y blasfemos de Sudamérica.
Galería de Fotos:
Cronista y Fotógrafo: Juan Baracaldo
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