
Cradle of Filth pisó el suelo argentino por tercera vez en su carrera. En esta ocasión, presentó el nuevo trabajo discográfico “Cryptoriana – The Seductiveness of Decay”, el doceavo para ser preciso. De antesala estuvo Lepergod calentó el escenario. Liderados por Rodrigo “Thav” Sánchez (Voz y Guitarra) pintó actitud firme con idas y venidas para con el público al termino de cada canción.
Cradle of filth es una de las bandas con más cambios de formación de la música pesada. Al menos en la escena extrema. La dupla de guitarras de Richard Shaw y Marek ‘Ashok’ Šmerda promulgan escuela de la new wave of british heavy metal. Incorpora aire fresco a una banda que tras varios intentos vuelve a estar firmemente de pie. La salida de James McIlroy y principalmente de Paul Allender había dejado a los fanáticos a la deriba. ¿Quién ocuparía el puesto de primer guitarra? Shaw tomo el lugar y ahora domina el escenario. Inclusive por momentos le toma prestado el protagonista al único miembro original: Dani Filth. Lindsay Schoolcraft acompaña y orquesta el ambiente oscuro, vampirico y victoriano de la banda inglesa.
Dani Filth es petiso. Aún así es gigante. Sus guturales y aullidos penetran directo al cerebro. Particularmente para esta gira dejo fuera temas del The Principle of Evil Made Flesh (1994) el disco debut de su banda. Esta gira mundial es la presentación del flamante album Cryptoriana – The Seductiveness of Decay en el cual Cradle se embarca en un sonido cercano al de Cruelty by the beast (1998). El concierto arrancó con «Guidel Cunt» y continuó con Beneath the Howling Stars. Hubo un popurri : Bathory Aria: Benighted Like Usher / A Murder of Ravens in Fugue / Eyes That Witnessed Madness y hasta se despacho con temas de su primer epoca como Dusk and Her Embrace. Ademas, sonaron The Death of Love, The Promise of Fever y Her Ghost in the Fog en lo que sería la primer etapa del repertorio. Aún que para ser preciso no hubo bis y Born in a Burial Gown
junto a From the Cradle to Enslave sonaron continuos al listado y el show se dio por finalizado.
Durante un poco más de hora y medio Dani Filth recordó porque es un emblema en la música extrema. De cuerpo pequeño, pero con un caudal vocal amplio aseguró que todavía está en óptimas condiciones para seguir rugiendo con su particular vozarrón de black metal.
El show dejo en claro que la banda sigue en pie y que con Cryptoriana la banda regreso a su sonido característico y de esa manera contentó al público.
Galería de Fotos
Cronista: Jonatan Dalinger
Fotógrafo: Juan K Baracaldo











