Eluveitie regreso a la Argentina el pasado miércoles 15 de abril en donde presento su último disco Origins en el Teatro Vorterix. La primera vez que los suizos se presentaron en Argentina fue en el verano del 2013, un 24 de enero para ser preciso en el caluroso Roxy Live de Palermo. En esa ocasión bajaron a Sudamérica para la gira presentación de Helvetios (2012). Poco tiempo antes de salir a escena Anna Murphy, segunda voz y encargada del hurdy-gurdy, confirmo a sus compañeros de banda que no iba a salir a escena a raíz de un problema de salud. Chrigel dio el comunicado a los fans, y al poco tiempo el concierto se realizó de todas maneras. Ya situados en la actualidad el miércoles pasado Eluvietie volvió a la Argentina nuevamente con un disco bajo el brazo Origins (2014), donde una vez más fue sin la formación completa. La historia fue similar a la de dos años atrás. En esta oportunidad Nicole Ansperger (violinista) y Kay Brem (bajista) no iban a ser parte de la partida por problemas de salud. Nicole sufrió una lesión cerca de una vértebra, mientras que Kay sufrió una seria recaída de una prolongada lesión en su espalda. Sin embargo como fue en el 2013 la banda decidió salir a escena de todas maneras.
Pero primero lo primero, las bandas invitadas: Einher Skald y Cernunnos. La primera en cuestión se mostró fuerte y agresiva pese a la incomodidad. Lamentablemente los viking death metaleros no contaron con el mejor sonido y el telón se le cerro antes de tiempo. Cernunnos por otra parte contó con una mejor apreciación por parte de los presentes que sirvió para terminar de precalentar el escenario, y superar el mal trago anterior.
Ahora bien, el momento esperado por todos llego de manera puntual. Eluveitie salió a escena a las 21 hs exactamente. En primer lugar Anna que recibió una ferviente ovación, después se acercaron Ivo Henzi, Rafael Salzmann, Matteo Sisti y Merlin Sutter acompañados también de numerosos aplausos. Pero todavía faltaba un recibimiento más. Chrigel Glanzmann termino de exaltar la adrenalina de los fanáticos. Como era sabido el primer tema en sonar fue «King», el demoledor primer corte del disco en cuestión a presentar, seguido por «Nil» de «Everything At Remains…» (2010). Acto seguido sin descanso sonó uno más del nuevo disco y se trató de «From Darkness».
La primera charla con los argentinos se harían al momento de terminar la canción de Origins dando así saludos, agradecimientos y una pequeña introducción a temas de discos anteriores. «Uis Elveti», «Thoundelfold» y el bestial «Primordial Breath» fueron los encargados de revivir estos primeros clásicos de otras épocas. A pesar de la falta de integrantes el sonido fue demoledor, por momento se notó la ausencia de Kay, aunque no tanto la de Nicole que fue suplida por Mateo con ayuda de sus instrumentos de vientos. Teniendo en cuenta que la vez anterior la que no pude ser partícipe de la velada fue Anna cuando llego el momento que pase al frente el Vorterix se vino abajo. En primer lugar la sutileza que tiene al dirigirse al público es exquisita. Su momento fue un lujo que anteriormente no pudimos contemplar pero tuvimos revancha. «Omnos» y «De Ruef vo de Bärge» (versión en Suizo-alemán del tema «The call of the mountains») sonaron impecables y festejados por las mil personas que se acercaron al teatro de colegiales.
Como si fuera poco los suizos a mitad del concierto nos deleitaron con un set acústico basándose en «Evocation 1 The arcade domination» (2009) con «Memento» y «Bricton» a la cabeza más el plus de «A Rose for epona». Alentados por el frontman el público se vio inmerso en un nuevo pogo al anunciarse «Kingdom come undone» y que fue continuado por «The silver sister». Ya sobre el final «Quoth of the raven» también sería parte de la partida con el desgarrador grito de la señorita Muyphy a mitad de la canción. La verdad es que fue una tarea complicada no mencionar a una canción de la lista ya que todas tuvieron su momento de consagración. Ya sea por el despertar de emociones que generaron en el público o sea por su interpretación sobre el escenario. No es un dato menor afrontar un recital sin la formación completa, y aún así dar un show de primerísimo nivel.
Por fuera del escenario en la última pausa de la noche los presentes realizaron los siempre firmes cantos de apoyo a su banda favorita. Y sí, todavía no podían irse faltaban dos temas en la lista y no eran para menos. Los himnos de Eluveitie fueron guardados para el final «Inis Mona» y «Tegernakô». La postura, el volumen, los guturales, los coros, la puesta en escena, en fin la banda en sí dio un show como debe darse más allá de los inconvenientes que puedan surgir y esto se vio en la repercusión del público con cantos de aliento y respeto. Eluveitie pasó una vez más por Argentina y ahora solo queda esperar que en su próxima visita puedan presentarse de manera completa.
Galería de Fotos:
Cobertura: Jonatan Dalinger
Fotografías: Cristian Estaurino
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