La siempre incandescente escena del Heavy Metal local, de corte callejero y subterráneo, continúa su derrotero con nuevos lanzamientos que dan cuenta del formidable presente que está atravesando. Los velocistas Malakía acaban de lanzar La Leyenda Roja, quinto lanzamiento de la banda, esta vez en formato EP, y tendría su presentación en sociedad el pasado viernes 17 en Primer Piso, en el corazón de la siempre amenazante ciudad de Buenos Aires.

Claramente no estarían solos, con el inicio de un nuevo día, los encargados de abrir la contienda serían los muchachos de Morbum, un proyecto que inició en solitario Francisco Goya (encargado ademas de los parches en Malakía), pero que rápidamente encontró secuaces para llevar la propuesta al vivo. Con total devoción al machaque y a la velocidad, levantando la bandera del thash metal mas crudo y agresivo, los muchachos salieron con el cuchillo entre los dientes, intercalando canciones de su EP Tormento Imsómnico con nuevas composiciones próximamente a ser lanzadas. Aquellos fans de actos como Dark Angel o Sadus encontrarán en Morbum una parada obligatoria.

La noche seguía su curso y sería el momento de que Athila azote el escenario. Un Heavy Metal tradicional, con guitarra al frente, riffs precisos y una voz estridente es lo que propone la banda, tomando por sorpresa a mas de uno y desatando total algarabía cuando se despacharon con certeros covers de “Come To The Sabbath” de Mercyful Fate y “Thundersteel” de Riot, para ponerle final a un poderoso set. Vivir Por El Heavy Metal es el nombre que lleva el único trabajo de la banda, nombre mas que acorde para la banda, unos verdaderos defensores de la Fe.

Caustic continuaba la contienda, otra joven banda que viene polulando y tomando por asalto cuanto escenario se les cruce. Con Arrowfire como único lanzamiento, los muchachos comienzan a despedirlo para darle lugar a las nuevas composiciones que esperemos que vean la luz en el corto plazo. Mucha actitud, rock y testosterona desplegadas ante un recinto que ya iba tomando color para el plato fuerte de la noche. El final con «Arrowfire» con Sebastián Braddock de Silverblade como invitado dejó el escenario calentito y al publico predispuesto para ponerle el broche de oro a la noche.

Ya bien entrada la madrugada, Malakía tomaba posición para acabar con aquellos que aún seguía en pie. El intro se disipa y «Raiden» se hace presente, la canción que abre el nuevo ep es también elegida para dar el puntapié inicial. Sin respiro alguno le seguía «Escila y Caribdis», un favorito personal no sólo del disco sino también de la banda, una canción que nació hit. Fiel a la Velocidad (2017) es el primer ep de la banda, y de éste sonarían «Ambición Carnivora», «Leviathan» (otro favorito personal) y el tema titulo. Continuando con La Leyenda Roja, le seguían «Un demente Contra Otro» y «Venganza en el Páramo», todo a una velocidad inusitada, un katanazo sonoro propio del ronin mas picante de la dinastía. Una acelerada versión de «Violados y Devorados» de Horcas era festejada como un gol sobre la hora mientras que «Hawaii 86» parecía darle el cierre a la noche. Pero ciertamente siempre hay tiempo para el rocanrol, «Burning Love» de Elvis y «Travelin’ Band» de Creedence Clearwater Revival ahora si le pondrían la frutilla al postre haciendo que nuestras articulaciones se prestaran para el movimiento.

Con  guitarras como katanas y la velocidad como principal aliado, Malakía presentó en sociedad La Leyenda Roja. Los demenciales chicos acelerados acechan en cada esquina, los débiles recurrirán al harakiri mientras que solo unos pocos presentarán batalla.

Por Martin Tula