Los chicos de Descarnado llevaron a cabo su fecha mas ambiciosa al día de la fecha. Con motivo de despedir el que fue su último trabajo, Enajenación, la banda se presentó el primero de junio en El Teatrito, en pleno centro porteño. Como actos soportes y sumados a la gran fecha, primero se presentó Por Tierra Firme y luego Bloodparade.

Por Tierra Firme salió en primer lugar a un tímido Teatrito para comenzar a calentar el escenario. La banda se encuentra cumpliendo diez años, llevando a cabo su versión de nu metal/metalcore de manera tenaz. Luego de su Ep debut Ronin y de su disco Orbis del año 2017, la banda publicó el año pasado Colmena. En segundo lugar y de manera muy puntual, Bloodparade salió a escena para llenar de ritmo el recinto y hacer mover a mas de uno en el público. Con una amplia trayectoria, los comandados por Brenda Jezabel se despacharon con una dosis de metal industrial a base de machaques y sintetizadores y entregaron una gran versión de «Self Control» de Laura Branigan.

Momentos previos al plato fuerte de la noche, se podía ver movimiento detrás del telón. Uno podía imaginar, como suele hacer Descarnado, una buena propuesta escénica y así se confirmo al comenzar su show. La banda dispuso en el escenario un gran juego de luces, que sumado a las proyecciones y al humo, daban gran presencia a los músicos. Para la especial ocasión, todos los músicos de la banda dieron el presente: Ivan Suarez en voz y guitarras, Nicolas Alonso y Leonel Di Stefano en guitarras, Brian Di Franco en bajos y Ulises Ochova en baterías. Cabe recordar que Nicolas Alonso vive actualmente en Estados Unidos.

La banda despidió así, de manera oficial su último trabajo, Enajenación. Death metal técnico, para amantes de lo podrido y de lo intrincado. Las rondas se abrieron constantemente y la gente disfrutó del logro de unos de los exponentes recientes del género mas extremo y complicado. Músicos jóvenes, público joven y una escena que se mantiene fuerte por unos y otros.

Cronista: Juan Cordiviola