Una de las noches más esperadas del año había llegado, por segundo día consecutivo Tarja Turunen, una finlandesa que con el tiempo supimos argentinizar, se hacía presente en esta ocasión en el teatro Vorterix, tras el rotundo éxito del día anterior en el teatro gran rex.

La velada comenzó con los chicos de Instinto Salvaje, a quienes llegue a verlos a mitad de su show desafortunadamente pero no por eso dejare de darles unas líneas a lo que pude apreciar. Desde un formidable cover  como “Dream on”, tema que varios artistas han interpretado desde Eminen hasta Dio,  con Eugenio Mosa en la voz pero no cualquier voz sino aquellas que te van envolviendo con dulzura, encanto y ese toque embriagador y potencia que la canción amerita. Sabiendo solucionar los agudos más extremos bajando dos tonos pero muy bien interpretado sin ninguna desafinación, lo cual es muy importante en estos temas no tanto si es el mismo tono sino que este bien hecho. Siguiendo con “Cazando rayos” mucho power, solo de Agustin Delucchi con muchos punteos o riff perfectos (con toques muy a lo Giardino) con el marcado bajo de Mariano Diaz que a su vez, acompañaba en coros y los potentes parches de Charly Villalba. Cerrando la noche con otro cover “Long live rock and roll” de nuestro amado Dio realizado a la perfección. Instinto Salvaje es una banda con mucho power, hard rock pesado cargado de riff y solos de guitarras, quizás abusa un poco de ese talento, pero el grupo en junto es una excelente formula que desenvuelve un show excepcional que es imperdible.

El momento más esperado de la noche con un teatro Vorterix lleno de punta a punta, y el telón se abrió pasada las 21 hs con otro sub-telón que llevaba la imagen geométrica de portada del disco “Colours in the Dark”. Con el emblema flameando, su silueta se veía a contraluz sumado a los gritos de los fans con la intro de “In for a Kill” y globos de colores que flotaron hacia adelante. Tarja Turunen siguió con “500 letters”, “Little lies” donde no dejó de saltar y desplazarse por el escenario, con un sonido excepcional a buen nivel. Un escenario que entre telas y luces de colores que seguían el movimiento hicieron vibrar al teatro junto a los golpes más fuertes y pesados de Mike Terrana en batería con “Falling awake” (What Lies Beneath -2010) y el solo perfecto de uno de los grandes guitarristas que tenemos en estas tierras, Julián Barret. Volviendo más a lo melódico y dramático “I walk alone” con la potencia de esos agudos que solo una soprano como Tarja puede desplegar, con los toques del teclado de Christian Kretschmar, como negarse a la seducción de la voz de esta mujer.

Una noche donde Turunen festejó junto a los argentinos, y lo repitió constantemente, y refirió sus nervios por estar tocando en casa dejando pasar temas como “Anteroom of death”, “Never enough” se pudo notar todo el virtuosismo de su banda desde los bajos Kevin Chown y el dúo de guitarras de Alex Scholpp junto a Julian Barret. Llegando a la mitad de la noche con “Dark star”, “Neverlight”, “Mystique Voyage, “Ciaran´s well”. Uno de los momentos más emotivo de la noche “Deliverance” uno de los mejores temas de su actual disco, que es una fusión perfecta entre balada y partes rápidas que llegan al alma con una letra muy romántica que permite escalar todas las tonalidades de Turunen, es un tema que te lleva al borde de las lágrimas. Avanzando con está nostalgia y fusión con “Medusa” quizás algo más tranquilo pero siguiendo la línea de las baladas, extrañando la voz de Justin Furstenfeld con quién hizo otra versión de este tema en “Colours in the Dark”.

Tras un mini receso todo volvió a toda marcha con “Victim of Ritual” donde hay que hacer una alabanza indudable a Tarja como hace esos cortos agudos impecables e incomparables, indudablemente no existen palabras para describirlo ni la inmensidad misma para felicitarla por tal imponente talento. Haciendo saltar a todo el teatro, donde explotó una bomba de color que no se sabe cómo pudieron ingresarlas, pero que a Turunen la hizo toser al finalizar el tema se ve que le quitaba el aire. Y como todo tiene su fin esta no sería la excepción culminando “Die alive”, “I wish i had an angel”, “Until my last breath” que tras al ver despedido al público por pedido de los mismo no abandona el escenario regalando un bonus track a la noche “Over the hills and far away” cover de Gary Moore que cantaba en Nightwish. Así culminó una noche desbordada de emociones, sensaciones, mucha energía con Tarja que no pudo dejar de admirar a sus fans por todo el cariño que le dan en cada show. Quizás personalmente esperaba escuchar el homenaje de Cerati en vivo que realizó la noche anterior en el Gran Rex, una lástima. Aun así fue un show increíble, irrepetible y recomendable para todo el mundo más allá de ser fan o no es un show que merece ser visto, escuchado y apreciado como es debido. Ojala no pase mucho tiempo para su próximo recital.

Galería de Fotos:

Ver galería completa

Cobertura y Fotografías: Cynthia Zelarayán