REVIVAL, ENERGÍA Y THRASH. Dark Warrior – Melonio (26-10-24)

«Volver a donde todo comenzó». Y así fue nomas, el pasado 26 de octubre de 2024 Dark Warrior festejó sus 15 años de trayectoria ni más ni menos que en el lugar donde debutaron en las tablas, el mítico Melonio Bar, ese clásico sótano tuneado con pinturas fosforescentes que le dan una mística inigualable al lugar, y los que se sumaron a esta festividad fueron Buena Muerte, R.I.P. y Detrimentor.
Buena Muerte fue la primera banda en abrir la velada alrededor de las 19:30 hs, con guitarra y voz y batería ya que el bajista – que es el mismo de Dark Warrior – (José Manuel Araujo) se ausentó por problemas de salud. El inicio fue sin vueltas con «Crónica de un Asesino» y «Catalepsia.» Además hubo tiempo para las gastadas ya que el vocalista manifestó: «quiero verlo a Iván de Dark Warrior con un vestido de quince festejando los 15 años de la banda» con risas interminables por parte del publico continuando con la performance interpretaron «La Rebelión de las Putas».
En segundo turno R.I.P. elevó la temperatura del recinto alrededor un gran despliegue musical con una combinación de tiempos e influencias de Almafuerte y Hermética sumadas a la rapidez de los riffs de bandas como Metallica. Interpretaron temas como «La Prisión» y «Maldita Ficción», está última como cierre.
En el transcurrir de la noche, Melonio era un hervidero la monada acompañó cada estribillo como si fuera un grito de guerra. En tercer lugar, Detrimentor aportó la cuota de thrash metal necesaria para mantener en llamas a Melonio, ellos salieron a las 21:50 hs donde hicieron un show muy acotado, pero contundente despidiendose a las 22:05 hs y dejando vestigios de riffs filosos y agresivos.
Por último, Dark Warrior salió a aniquilar la noche donde literalmente fue una aplanadora thrashera haciendo un set list soñado tocando clásicos de su primer álbum y una presentación descomunal de su nuevo trabajo discográfico. Esta aplanadora tuvo dos conductores: el principal fue Iván en voces y guitarra y en la otra guitarra tuvo a Adrián Scoppe (Forever Hard Rock) que se comió musicalmente el escenario. En los machaques de fondo una bestia como Tony que cada golpe retumbó atronadoramente en el sótano de Melonio. La monada estaba en total extasis algunos se apoderaron de la valla y levantando los puños ante cada golpe de batería y en una segunda línea hacia atrás otros se atrevieron a golpearse entre sí como para estar a tono con la caldera que se había convertido el recinto, donde fueron lenguas de fuego de violencia y thrash.

Por Sergio Silva






















logos_apoyo