Allá por 1979 una joven banda de punk se formaba en Edimburgo, Escocia. Fue bautizada con el nombre The Exploited, y como toda banda empezó siendo un simple pasatiempo buscando dar un mensaje. Lo que quizá no tuvo en cuenta es que dicho mensaje iba a ser uno de los más fuertes del punk influenciando tanto a fanáticos como a bandas en sí. Después de un largo viaje que duro cerca de 40 años, el vocalista y único miembro original restante, Waitte Buchan, decidió que era tiempo de dar un cierre y para ello planeo una gira despedida. La misma tuvo como uno de los destinos la Argentina el pasado 03 de mayo en Groove. Hubo un ambiente de crestas, cerveza y amistad, uno de esos sábados que pintan para perfectos.
Cerca de las 19:00 horas se abrieron las puertas del boliche para un ingreso lento y tranquila. Una vez acomodados los primeros punks fue el momento del acto de apertura a cargo de Leila Harlac, una joven que deleito con una propuesta de pop punk sólida y potente. Tras una pequeña espera ya pasadas las 21 horas e se volvió a abrir el telón y The Exploited apareció en el escenario, sin mucha vuelta ni entrada previa Waitte saludo al público y la fiesta dio inicio con “Let Star a War (Said Maggie One Day)» para un Groove ya casi en su capacidad máxima con saltos y agite en todos lados. Sin mediar palabra pasaron “Fight Back” y “Dogs of War”. Después llego un breve saludo de Buchan quien prefirió no hablar mucho, sino que dejo que su música hable por él.
Durante la noche el sonido fue más que efectivo casi sin desperfectos salvo en algunos momentos donde el bajo no se lograba escuchar. El festejo continuo “The Massacre” y “UK 82”. La noche ya venía siendo perfecta, se veía una banda más que afianzada en el escenario y muy receptiva con el público, pero no conformes con eso Buchan se terminó de llevar los elogios y aplausos cuando se puso una camiseta de la selección argentina para seguir con “Chaos is my Life” , “Alternative” y una gran lista de éxitos como “I Belive in Anarchy” y “Rival Leaders” y siendo una de las más festejadas de la noche “Beat The Bastards” la cual, junto con el disco homónimo, marco un cambio en el estilo y el sonido del grupo acercandose al hardcore y al thrash metal; algo que definitivamente atrajo a nuevos fans.
Cercano al cierre sonaron “Cop Cars”, “Fuck The System”, “Army Life” y otra de las más cantadas de la noche “(Fuck The) U.S.A”. Llegado un breve descanso Buchan y compañía volvieron a escena para los bises y el primero fue un clásico tanto por su historia como por lo que sucede cuando se toca esta canción, había llegado el turno de “Sex and Violence”. Entre toda la confusión con la gente de seguridad los fans empezaron a subir al escenario de manera descontrolada hasta que lo coparon en su totalidad. Wattie estaba un poco reticente con el público ya sea porque estaba cansado o porque si comenzaba a hablar o fotearse con los fans no terminaba más. Por consecuencia, hubo que detener el show para acomodar gran parte del escenario, quizá por la euforia del momento muchos equipos quedaron desconectados y sacados de su lugar. Una vez subsanado todo llego un clásico de clásicos para el final, de esos que pusieron una frase, un grito y un mensaje importante en la escena punk “Punks Not Dead” y la despedida definitiva con “Was It Me” cerrando la presentación de The Exploited en nuestro país en un aplauso ensordecedor.
The Exploited cumplió con Argentina con una presentación final; la huella será eterna y que siguen siendo los mismos de siempre. Fuimos testigos de la última presentación de esta icónica banda que deja una alegría por lo disfrutado, pero un dolor por lo que sigue. Lejos está ese Waitte Buchan que nos preocupó a todos allá por 2014 cuando se desplomo en el escenario para luego revelarse que tuvo un ataque cardiaco, pero que por suerte pudo sobrevivir y no solo eso, sino que además le permitió seguir en carrera hasta este punto. Este punto donde pudo decir ‘es suficiente’ a su modo, con un grito en el aire, un grito que se escuchó y se escuchara en todos lados y que trasmite un mensaje: que se joda el sistema, que golpees a los bastardos, que somos los perros de guerra, que el caos puede ser nuestra vida, pero el más importante de todos los mensajes siempre va a ser que los punks no están muertos.
Por Fernando González
