Revamp pasó por Buenos Aires bajo el marco de su gira South American Wild Card Tour 2014. Floor Jansen pisó suelo argentino por tercera vez para brindar un show único. Con catorce años en escena uno no puede esperar menos que excelencia, más tratándose de la señorita Floor Jansen que cuenta con After Forever y Nightwish entre otros proyectos en el pasado. Sin lugar a dudas las expectativas se cumplieron. Pero primero lo primero. Boudika es una banda de power metal sinfónico progresivo conformada por Eve Giusti voz principal, Chizzo Colle segunda voz y guitarra, Mauro Sollier coros y guitarra, Fede Moore en bajo, Leo Moore a cargo del teclado y Julio Díaz en batería. Arrancaron con «Dark Water» para seguir con «Sensorium» de Epica y «Passion and the opera» de Nightwish, ambas versiones aceptadas por la gran cantidad de público ya dentro del recinto. Eve cuenta con un registro soprano, al igual que Tarja Turunen, y las influencias de la finlandesa son notorias. Los juego vocales, las formas de cantar, y podría decir que hasta algunos movimientos. Culminaron su set con «Dark Side» y «Fallen Angel» de su propia autoría.
Nueve de la noche, The Roxy Live lleno, luces apagadas mientras que Arjan Rijnen, Jord Otto, Ruben Wijga, Matthias Landes y Henk Vonk salian salieron individualmente para que de forma final se presente ella, Floor Jansen y desate la euforia de unas cuatrocientas almas. «The Anatomy of a Nervous Breakdown: On the Sideline» y «The Anatomy of a Nervous Breakdown: The Limbic System» dieron el pie inicial al repertorio que se basó en los dos discos editados por la banda, el homónimo del 2010 y Wild Card (2013). Con pedido de desactivar el flash, tanto para los fotógrafos acreditados como para los fans, a la cantante se la vio contenta, agradecida y bella. En perfecto estado. Aún así fue difícil de creer la perfección tanto de su voz como del sonido en general. Meticulosos hasta lograr llegar a la perfección, todos los temas sonaron de manera asombrosa, resaltando «Kill Me with Silence» y «Sweet Curse». Con gran carisma Jansen apaciguó a sus fanáticos mientras que las luces se iban poniendo tenues para que sobre el escenario solo quede acompañada de Ruben Wijga para interpretar «I Lost Myself». Silencio absoluto para apreciar una versión hermosa, y finalmente ovacionada. La última seguidilla contó con «The Anatomy of a Nervous Breakdown: Neurasthenia», «In Sickness ‘Till Death Do Us Part: Disdain» y la violenta «Wolf and Dog».
Preparados para la recta final Arjan Rijnen tomó el micrófono para conversar con el público, arengarlos para seguir con la presentación que estaba llegando a su fin. Con una renovada frontwoman la banda continuó el show con tres canciones más, pero no creo que haya sido las mejores elecciones. Capaz el irse y volver del escenario pero se notó un agotamiento despues de tanta adrenalina por parte del público, sumado a que no fueron los temas más fuertes para un final. Aún así «Sins», «Energize Me» (de After Forever) siendo el más festejado de los tres y «In Sickness ‘Till Death Do Us Part: Disgraced» cumplieron son su objetivo: contentar al público argentino. Entre saludos, regalos y filmación por la propia de Floor durante el último tema del show, se despidieron uno por uno. Después de tantos recitales asistidos al bar de Palermo no tengo dudas que este fue el mejor, la presentación, el sonido, las luces, el profesionalismo. Solo me queda por decir que fue un show de primer nivel como pocos.
Galería de Fotos:
Cobertura: Jonatan Dalinger
Fotografías: Julian Quinteros
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