
El brutal trío de Olavarría, f, se presentó en la tormentosa noche del sábado 20, en Club V. Dos grandes e importantes razones motivaron dicho evento, a saber la presentación de su nuevo disco próximo a salir y el aniversario número 15 de la banda. Allá por el año 2010, Grotesque Impalement tomaba forma con los hermanos Ricardo y Daniel Krotter, el primero encargado de la batería y el segundo de la guitarra y de la voz, y con Manuel Rossetti al mando del bajo. Primero publicaron un EP homónimo y luego en el año 2021 su disco debut, Morbid Fetal Creation. A base de riff intrincados, brutales y gancheros, llevados a cabo por músicos por demás talentosos, la banda se convirtió en un acto imperdible para cualquier amante de la música extrema.
‘A la realidad le gustan las simetrías y los leves anacronismos’ escribió una vez Jorge Luis Borges en su cuento El Sur. Con esta frase en mente, la complicada noche del sábado en tanto pronósticos alarmantes, vientos y una lluvia pesada, presentó como primera banda, curiosamente, a Megalodón. Poéticamente hablando, un clima ideal para una banda con dicho nombre. La jóven banda de slamming deathcore, se encuentra dando sus primeros pasos y bien firmes los esta haciendo. Sonido brutal y breakdowns pesados, típicos del estilo. Con un EP titulado La Extinción de la Humanidad (2024) y un disco debut de este mismo año, Maleficio: El Comienzo, la banda dio comienzo a la noche en Club V. Conforme iban pasando los temas, algunos seguidores de la banda realizaban las clásicas piruetas ritualísticas.
La noche continuó con Monje. Esta vez no por el nombre, sino por su música, la banda marido a la perfección con el apocalíptico clima reinante fuera del recinto. Es que la propuesta de Monje, con su mezcla de doom, sludge, death se asemeja a una tormenta, a la desesperación, al sufrimiento. Extremos por momentos, rápidos en algún pasaje y sobre todo pantanosos, la banda lleva tres discos publicados, siendo el último el del año 2023 y titulado Culto al Fin de los Tiempos. Como es costumbre, su vocalista Matías Ibañez mantuvo un constante ida y vuelta con el público, y no dejo de mencionar, agradecer y felicitar tanto a los jóvenes Megalodon, como a los cumpleañeros Grotesque Impalement. Canciones hipnóticas, llevaron a los espectadores a un trance musical, y así quedó, tanto escenario, como público, preparados para el último acto de la noche.
Grotesque Impalement dio inicio a su presentación con los temas nuevos del próximo disco. El flamante nuevo trabajo, Impaled with Hate, está próximo a salir, por lo que la banda fue casi tema por tema, ejecutándolos. Por el momento, el único adelanto publicado es «Murderer Instinct». Como bien saben hacer, los músicos ofrecieron un death metal brutal, plagados de riffs putrefactos y muy técnicos. Es muy destacable la labor de todos los músicos, desde la velocidad de su bajista para llevar a cabo esos riffs endemoniados, hasta la vehemencia con la que golpea su baterista y la coordinación meticulosa de su cantante y guitarrista, para llevar adelante ambas labores. En un ejercicio absurdo, pero no menos útil para destacar a los integrantes, si uno muteara el sonido, igualmente podría percibir con sólo mirarlos tocar, la brutalidad de su música y la habilidad de ellos como músicos.
Luego del material nuevo, luego también de agradecer a los presentes en una jornada difícil por el clima, y finalmente a sus colegas músicos por la previa, la banda tocó algunos de sus temas previos y ya conocidos. Llegando al final, destaco personalmente la hipnótica y extrema «Incineración», con su pequeña intro de batería y luego un riff que acompaña hasta el descontrol total.
Grotesque Impalement festejó sus 15 años y presentó su nuevo material. Dio una presentación sobria, fiel a su estilo. Brutal, técnica, pero sin perder ese gancho característico. Una banda sin muchas pretensiones, sin artilugios ni parafernalia. El trío se planta en el escenario y hace lo que mejor sabe hacer: derretir caras, aplastar cabezas y detonar oídos.
Por Juan Cordiviola