El Tano Romano volvió a Flores con su banda para festejar los veinte años del disco Víctimas del vaciamiento de Hermética, como lo supo hacer con el segundo trabajo de la H. Tal como en aquella ocasión, muchos músicos fueron invitados para que adornen este festejo y sea una verdadera fiesta de metal nacional. Más allá de las críticas y las opiniones encontradas sobre si está bien o mal lo que hace Antonio Romano con este tipo de festejos, creo que es un buen momento para la reunión de varios músicos del palo y que la gente pueda disfrutar. Debido a las inclemencias climáticas del día llegué un poco/bastante tarde y no pude ver los primeros dos temas de la noche que fueron “Soy de la esquina” y “Otro día para ser”. La idea era repasar el disco en forma completa y en orden, y luego ir despachándose con canciones de sus anteriores bandas y de su actual Malón. Ergo, la seguidilla estaba conformada por “Traición”, “Olvídalo y volverá por más” y “Hospitalarias realidades” mientras que la gente seguía llegando y la presente cantaba cada una de las líneas de cada tema, dando su cuota de aguante para conformar una verdadera fiesta. La banda está conformada además por el inquieto y talentoso Eddie Walker en el bajo, Pablo Hentsch en batería y Orlando Riveros en la voz.

Siguiendo el orden del disco, fue el turno de “Buscando razón” para que al finalizar se haga presente el primer invitado de la noche y nada más que Claudio O’connor, para poner toda su garganta en “Cuando duerme la ciudad”. Fue sencillamente sublime y espectacular. Posteriormente llegaba el turno de uno de los temas más representativos de Hermética y que siempre es arengado por toda la gente: “Ayer deseo, hoy realidad”. Ya finalizando esta parte del show, se hizo presente Silvina Kuadrado (hermana de Carlos, bajista de Malón) para que junto a la banda interpreten “Moraleja” y al terminar, mientras los músicos desaparecían del escenario, Romano dijo unas pequeñas palabras para presentar al siguiente tema el cual cierra el disco y se trata del instrumental “Tano solo”.

Regresando todos los músicos al escenario para continuar con la segunda parte de la noche, llegó el turno de presentar un tema nuevo llamado “3772” que hace mención a la tragedia de Once ya conocida por todos. Continuando la lista y los invitados, subieron al escenario los hermanos Martínez de Vorax para hacer “En las calles de Liniers”, uno de los mejores temas de la H a mi parecer. Y la lista seguía pasando así como los músicos que iban diciendo presente, tal el caso del Turu Paredes que subió para cantar “Endeudando nuestro sol” de Razones concientes” y de Ezequiel (asistente de Hermética) que fue invitado para tocar “Desde el oeste”. Había más invitados y más temas por tocar, era el turno de “Malón mestizo” que debió ser cantado por Juan Soto que no se hizo presente y en su lugar lo cantó Orlando, voz actual de la banda. Si de momentos especiales y shows especiales se habla, que podrá decir Martín, un alumno de Eddie que es invidente y fue invitado a tocar el bajo en “Tu eres su seguridad” mientras que Walter Meza le ponía voz al tema. Doble, triple y cuádruple ovación para este chico que pudo sentir lo que tanto deseamos y no podemos, se fue merecidamente aplaudido y con un recuerdo imborrable de su memoria.

Enfilando hacia los temas finales la banda dio a conocer otro tema nuevo llamado “Te quiero contar” para pasar a un tema de Visceral para el cual fueron invitados Willy Caballero y Mariocco Piaza (Mental) interpretando “Arrancados del sistema”, y su término subió Randy (hijo del Tano) para tomar su lugar en los parches y junto a Willy y Carlos Kuadrado tocar el clásico “Eskape”. Y como estaba Carlos en el escenario y estaban O´connor y el Pato Strunz en el lugar, fueron todos invitados para que Malón diga presente y se despache con “Castigador por herencia”. La reacción del público fue sensacional y se cantó todo de principio a fin, disfrutando plenamente esta “sorpresa” de ver a Malón sin previo aviso.

Y con los Malón en escena no podía faltar otro tema de Hermética, por lo que se largaron a tocar “Memoria de siglos” que causó un revuelo total en el recinto. Ya con la banda original sobre las tablas, llegó el turno de los tres temas finales que fueron comandados por “Evitando el ablande” y a modo de Encore sonaron “Vientos de poder” y por último “Robo un auto”. Así terminó un show excelente con un muy buen sonido, una muy buena convocatoria, muchos músicos invitados y excelentes temas del primero al último. No soy quien para juzgar el actuar de Antonio Romano, ni voy a calificarlo de “ladrón” por hacer lo que hace. Soy seguidor de su banda actual y de sus anteriores, y también de todo lo que haga Ricardo Iorio, por eso más que dedicarme a criticar me dediqué a disfrutar un excelente show de heavy metal nacional.

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Cobertura: Nicolas Lopez
Fotografías: Julian Quinteros