¿QUIÉN DIJO QUE EL ROCK SE IBA A MORIR? Rata Blanca – Movistar Arena (19/11/2025)

El año 2025 encuentra a Rata Blanca cumpliendo 40 años como banda. Sin lugar a dudas una de las bandas más importantes, más influyente y con una vigencia notable en lo que respecta al metal y al rock pesado nacional. Por otra parte, este mismo año uno de sus discos mas exitosos cumple 35 años, Magos, Espadas y Rosas; aquella placa que cuenta con éxitos que fueron más allá de generaciones y géneros musicales como «La Leyenda del Hada y el Mago» y «Mujer Amante». Es por todo esto, que la banda liderada por Walter Giardino se presentó nada mas y nada menos que en el Movistar Arena.

No es algo menor, sino que por el contrario, es un hito histórico en nuestro país. Fue la primera vez que una banda de metal se presenta en dicha arena. Y sin acompañantes, sin de hecho mucha publicidad. Rata Blanca en el Movistar, ni mas ni menos. Un miércoles. Y el recinto estuvo lleno. Se comentaba que estuvo con entradas agotadas.

Antes de hablar de la verdadera fiesta que se vivió, mejor comentar aquellos puntos no tan buenos ni lindos. El primero, el horario. Uno nunca disfruta de los atrasos en un show, aunque esta acostumbrado a ciertos desfasajes lógicos. El show que estaba anunciado a las 21 horas, tuvo una demora de 35 minutos. Si tenemos en cuenta que fue un miércoles y que (afortunadamente para los asistentes) la banda tocó 2 horas con 45 minutos (no hay error de tipeo), esa demora toma mayor relevancia. El otro aspecto cuestionable fue el sonido que presentó la voz de Adrian Barilari en niveles mas bajos que el resto de la banda. Obviamente la guitarra fue preponderante y la batería muy presente también, por lo que la voz se esperaba que tenga mayor presencia.

A lo positivo. El público fue muy heterogéneo. La mayor parte, por cuestiones lógicas, gente que habrá promediado los 40/50 años. Pero por otro lado, mucha juventud. Y sobre todo, muchas familias, muchos padres con sus hijos, muchas madres con sus hijas. En general, el clima entre la gente fue familiar. La totalidad del público no termino de entrar sino hasta instantes previos a que la banda salga al escenario, momento en donde realmente se veía un recinto colmado.

En la previa, y teniendo en cuenta la celebración de los 35 años de Magos, Espadas y Rosas, se especulaba con que la banda arrancara tocando el disco en su totalidad, o primero un repaso por su carrera para luego dedicarse al disco, o simplemente entremezclar todo. Esta última opción fue la que terminó sucediendo. Así, y después de unas visuales en las cuales se podía ver un gran grupo de ratas blancas caminando por las calles, pasando por el Bajo Flores y finalmente entrando al Movistar Arena, la banda comenzó su presentación con «Hijos de la Tempestad» de su mas reciente EP del 2024. Acto seguido, y dando un gran salto en el tiempo, la pesada «Sólo para Amarte» continuó agregando clima al inicio del show, para finalmente coronar el tridente inicial con «Volviendo a Casa», primer gran pogo de la noche.

Decir que en el Movistar Arena, las luces y la escenografía en general, son de primer nivel y resultan impactantes, no es novedad. Aún así, vale mencionarlo y además agregar que las visuales proyectadas en la enorme pantalla de fondo acompañaron cada canción según su temática. Con la sensación de poner a trabajar a mansalva la inteligencia artificial, nos encontramos con grandes visuales, algunas mas bizarras que otras, como la tipografía en estilo grafiti para el momento de «Chico Callejero» o el imponente dragón para «Los Ojos del Dragón». De igual manera, las visuales supieron acompañar de manera impecable a la banda, sumado a lo ya sabido de las luces y el humo.

De la placa cumpleañera, el primero de los temas en aparecer fue «El Beso de la Bruja», frenética y heavy speed metalera. Luego fue el turno de «El Camino del Sol» con todo su clima de medio oriente que imprime la canción. Una pegada a la otra, mi personal favorita «Haz tu Jugada», «Días Duros» y la instrumental «Porque es tan Difícil Amar» fueron uno de los momentos de la noche. Antes de retirarse del escenario por primera vez, el clásico absoluto «Mujer Amante», con total vigencia para delire del público. Y ya previo a cerrar la noche, «La Leyenda del Hada y el Mago», la canción emblema de Rata Blanca.

Hay que recordar, y lo vuelvo a mencionar, que la banda tocó 2 horas y 45 minutos. Barilari, promediando las dos horas de show, preguntó al público si querían seguir, que ellos ya son grandes y que estaban cansados. Sin esperar demasiado, anunció que quedaba una hora de show. Si bien no fue literal, se despacharon con 45 minutos más, una demencia.

Giardino por su parte, personaje principal en lo que la banda respecta, se tomó un único momento en la noche para hablar al micrófono. Contento por presentarse en Buenos Aires, y en un lugar como el Movistar, hizo mención a que la música pesada, el rock y el metal, no dejarán de existir nunca. Aplausos, gritos y entusiasmo de la gente.

Llegando al final, cabe mencionar también las labores del ya conocido Danilo Moschen en los teclados y de los más recientes en ingresar a la banda: Juan Pablo Massanisso en bajo y Alan Fritzler en batería.

Lo último de la noche fue con «El Último Ataque», que coronó una presentación para la historia de Rata Blanca, pero también para la de la música pesada nacional. Barilari dejo picando una pregunta, ¿Quién dijo que el rock se iba a morir? Caminando por la calle Humboldt, y reflexionando en esto, sólo pude pensar en lo equivocado que están aquellos que piensan de esa manera.

Por Juan Cordiviola
PH: Nacho Arnedo (Cortesía)























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