Verano negro es una propuesta de shows por la productora Mts a puro rock en Buenos Aires para los que se queden en la ciudad, ya que si vamos a morir calcinados y sin respiro que sea acompañados de buena música. El sábado fue uno de esos días agobiantes, pero nada detuvo al público que estuvo desde muy temprano. A tan solos minutos de pasadas las 19:00hs salió al escenario Clay haciendo “Mi sombra” (En el silencio 2013) con excelente voz de Juan Pablo Salinas con gritos quebrados a lo Chester de Linkin Park. Con el torso descubierto todo transpirado, el agite constante a toda marcha con el apoyo del público enardecido, continuaban con “Sé que podemos” saltando por todo el escenario con coros del bajista Martin Merayo, y los golpes de los bombos de Albis Albarracín que no le da descanso demuestra gran destreza y ferocidad. Siguiendo con “Headbreaker” un gutural agudo, intenso y desgarrante con clima de mucho dramatismo marcado por el riff de la guitarra, y los graves del bajo de Merayo con un público que no paraba de poguear. Con esa facilidad de cambiar la voz de limpia, clara a agudos intensos como si nada seguido con “Donde todo comenzó”, “Distancias” y cerrando como broche de oro un tremendo show de Clay aunque la recién empezaba con “Ballsmasher” con Javier Knario Compiano, cantante de Plan 4, siendo un dúo explosivo de grandes contraste vocales de agudos, voz quebrada y la inigualable voz gruesa de Knario. Finalizando un show impecable de buen sonido con músicos de gran categoría, y excelente música.
Pegado a ellos se vuelve abrir el telón para dar paso a Bruthal 6 con sus trajes negros largos iniciando con “Despertaré” (Augenblick 2011) de riff fuerte y pesado de la viola de Xavier Agüero sumada a la voz intensa y fuertes gritos guturales de Nazareno Mingone, siguiendo con “Una vez más” y una noche que cada vez se ponía más pesada, en este tema podíamos apreciar la velocidad de la batería de Ezequiel Giménez y sus golpes potentes y precisos a los platillos, con esos toques ligeros de los coros de Silvio Escalante. Sin dar descanso con un doble bombo junto al bajo de Escalante y los guturales graves de Nazareno hacían “Monstruo”, “Y ahora que” con ligeros golpes de platillos es el inicio de una canción con la voz imponente de Nazareno, y un excelente dúo de guitarras de Javier Olmos y solos perfectos del guitarrista líder Xavier Agüero. “Libertad” comenzando con golpes de platillos y guitarra se une en un machaque infernal del bajo de Escalante, y también va cambiando la tonalidad de la voz de Mingone mutando cada vez más podrida e intensa. Pasando a “Aferrado al dolor” y un cover infaltable de Nirvana “Smells like teen spirit” con gritos graves y ese toque personal al tema haciéndolo más pesado tanto en la parte vocal como musical. Y un final particular, bien pesado como amerita el show de Bruthal 6 que fue cada vez más intenso, pesado de puro headbanging a torso descubierto sin poder soportar más el calor Nazareno para interpretar “Fuego” a puro gutural donde demostró todo su caudal pasando por todos los tintes, y una banda que jamás paro de tocar con toda la garra.
Siendo el momento de Otra Salida una banda a puro hardcore que da inicio con “Sin vos” siguiendo la línea de voces podridas y fuertes que veníamos escuchando junto a una guitarra poderosa de Gabriel Teran pasando a “Solo depende de mí” (Cara a cara 2004), “Tu enemigo”. “Adversarios” un tema muy pesado donde se nota mucho el bajo de Leo Álvarez, esos tonos graves que generan un clima lúgubre. Volviendo a No Desit, su álbum lanzado en el 2007, con “Tu cruz” a puro pogo con un público que jamás dejo de agitar la noche sigue “Manteniendo la furia” con los impecables gritos de Marcos Ventrella que no afloja esa garganta extendiendo sus cuerdas vocales al máximo. Culminando la noche de hardcore a la vieja escuela con “Otra salida”, “Cara a cara” y “Mi batalla” sin olvidar la velocidad, virtuosismo y firmeza en los golpes de los parches en la batería por parte de Mariano dejando a los presentes más que extasiados que no pararon de poguear y saltar a toda furia. Ya podemos ir diciendo que esta fecha mantiene un nivel muy alto en calidad de artistas.
Entre luces tenues con dos gigantografía a los laterales con la imagen del jabalí de Rock Podrido Mastifal se hacía presente en el Teatro de Flores con la voz grave gutural al frente de Miguel Maciel la noche arrancaba con “Puertas y laberintos” (Intermundia 2010) con el rasguido del dúo de guitarras de Diego Conte y Matías Munighini, sumada a la rapidez de los golpes de los bombos de la batería de Mariano Martin marcando los tiempos. Continuando a toda marcha un show imparable de Mastifal a “Ojos de Buey” a puro machaque de violas y bajo de Alex Martin, y como describir esa voz putrefacta de Miguel bien agonizante de película de terror sosteniendo unos guturales perfectos. “Más allá de la razón”, y volviendo a Rock Podrido, nuevo álbum de la banda editado en el 2013, haciendo “Postcruxificción” de Pescado Rabioso. Pero el setlist elegido para la noche fue más volviendo a los clásicos de Mastifal bien pesados y podridos alternando entre Intermundia y Vehemente (2007). Interpretando “Tenaz”, “Desde las tinieblas”, “Síndrome de supremacía” sin poder culminar el show sin antes hacer “Tiempos violentos” cargados de riff donde el público estalla en un pogo inmenso y Miguel muy agradecido con los presentes deseando que estas fechas sigan creciendo junto al metal cerrando con “Bionecrosis”.
Siendo uno de los momentos más esperados de la noche a las 22.30hs Plan 4 sale a escena a romperla, a pesar de la pesadez del calor que no daba respiro, con “En mil pedazos” con esos gritos graves e imponentes de Javier Knario Compiano, y los solos de guitarra que no paran de dar esos toques aguerridos y riff agudos con mucho mosh que recién empezaban. Haciendo su cuarto disco Horizonte Rojo Sangre tocando “Yo lo quise así” desplegando la destreza en batería de Gonzalo Espejo. En “Mi falta de fe” Knario no paraba de saltar y desplazarse por todo el escenario acompañado de los tremendos riff de Ezequiel Arias, ante un público enardecido que no paraba de poguear y hacer mosh al compás de los gritos potentes de Knario. La fiesta parecía recién empezar que ni el agobiante calor podía detener, la noche sigue con “El nido de la serpiente”, “El verdugo” y “La mejor arma”. Pasando a su segundo disco Dos Caras editado en el 2007, tocando “Mi religión” deslizando los dedos por la guitarra al inicio, mucho golpe de platillos de un hi hat que no para de sonar sumado a los coros de Matías Solo genera una buena fórmula. “Hermanos de sangre”, “No me des por muerto” y con una fuerte risa macabra con los brazos extendidos arengando al público Knario se prepara a interpretar a voz pelada, avasallante “Iron Man” enganchado a “Paranoid” de Black Sabbath sin dar descanso empieza a cantar a capella junto al público “Ella”.
Finalizando ya una fiesta que parecía no tener fin a toda garra con “La jaula”, “El último recurso”, “Entre la vida y la muerte” (Cambio de piel 2005) y “Brillando en el ayer” es de esos temas lentos y sentidos en el alma recordando a Leandro Zunni, ex guitarrista fallecido, siempre presente en sus recuerdos de la banda y el público que mejor homenaje que un tema plagado de solos de viola y la desgarrante voz de Knario que llevaba puesta una remera con la silueta del guitarrista. Plan 4 una banda que nació entre las cenizas y sigue avanzando sin detenerse brillando cada vez más, brindó un show extraordinario como se debe demostrando donde está el verdadero metal.
Galerías de Fotos:
Cobertura: Cynthia Zelarayan
Fotografías: Pablo Gándara
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