Noche de sábado, noche de rock. Y si hablamos de rock estamos diciendo un compuesto de tres cosas: buena música, amigos y cerveza. Exactamente esto fue lo que pasó el fin de semana en Planta Alta, ubicado en el barrio de Flores. La batuta estaba a cargo de Palenke Rock, banda de Concepción del Uruguay y de Chevy Negra, proveniente de Mataderos.
Llegué allí alrededor de las 23:15 luego de unas cervezas con una amiga en un bar aledaño.
Había sido advertido sobre el lugar, que era chico y la verdad que me lo habían hecho con razón. Tal vez más chico de lo normal, pero eso no impide que una banda pueda tocar cómodamente. ¿Por qué? Porque el lugar tiene un sonido excelente, algo que me sorprendió totalmente cuando subieron las bandas a tocar. En fin, el lugar es chico pero es un muy buen terreno para que las bandas toquen y además posee el plus de un sonido muy bueno. Una vez dentro fui en busca de una mesa y me senté a compartir otra cerveza con mi amiga mientras de fondo estaba proyectado un DVD de AC/DC (Live At River Plate) que luego fue cambiado a uno de ZZ Top (Live From Texas). Tremendos los dos DVD.
El clima que se percibía era agradable, grupitos formados en las distintas mesas compartiendo la música y un trago, mientras que otros también se reencontraban con amigos. ZZ Top seguía sonando de fondo y los chicos de Palenke subían al escenario para empezar con la fiesta (¿Cervezal?, ja) y brindarnos su música entrerriana. El trío inició su repertorio con “La mujer de mi vida” entregando buena música y buena onda. El sonido fue buenísimo y eso ayudó a los pibes de demostrar lo que son capaces de hacer con los instrumentos. Buenos riffs, buen doble pedal y una voz que encaja justo con lo que ofrece la banda. Siguieron con “Llovió otra caída” y “Hombre de Blues”, que está dedicada a una persona conocida por ellos allí en Entre Ríos. Por mi parte no conocía los temas y sin embargo los disfrutaba porque la banda suena muy bien, como tantas que están incluidas en lo que la gente suele llamar como “under”. Sí, es obvio que toda banda pasa por su momento under, pero en nuestro país condenamos a casi todas las bandas a vivir con ese rótulo. ¿Cuántas bandas “grandes” podemos nombrar? No muchas, las más conocidas de las que no voy a dar nombres. ¿Y el resto? Existen bandas que son excelentes, con un sonido y una potencial peculiar, pero debido al exitismo del público no suelen ser tan convocantes.
En fin, el show de continuar. Y continuaba con “Línea mortal” y “El isleño” (siempre a cargo de Palenke) seguido de “Murmullos y fantasmas” y “Mi destino”. De esta manera terminaba la seguidilla de temas propios, y no hubo uno que me haya aburrido, o me haya hecho cambiar la vista a otro lado o lo que sea. Palenke rockea, tiene buenos temas y las letras son interesantes.
Ojalá puedan venir más seguido a Buenos Aires para que la gente los escuche, tienen mucho para dar. Presentados los temas propios, Palenke ofreció un puñado de covers para terminar un show de calidad. El primero fue “Sirva otra vuelta pulpero” de la banda uruguaya Cuchilla Grande (tal vez es más conocido por la interpretación de la banda Almafuerte en su disco Piedra Libre), siguiendo con “Ruta 66” y “Sucio y desprolijo”, temas que no necesitan presentación. Qué manera de sacarnos con estos dos temas, más que nada el segundo. Es un fiel reflejo de muchos de nosotros, los rockeros. Gabriel “Gau” Barrera (bajista y cantante de Chevy Negra) subía al escenario para cantar junto a Palenke “Born to raise hell”, temazo de la banda inglesa Motörhead, para que Palenke toque “El viejo hombre al costado del camino” y así darle paso a sus dos últimos temas finales. Casi de manera sorpresiva, pero no menos grata, se despacharon con dos temas de Creedence Clearwater Revival (mundialmente conocida como solamente Creedence). El primero en sonar fue “Fortunate Son” y cerraron con “Travelin’ Band”, para que la gente se ponga a cantar y bailar aún más de cómo lo venía haciendo.
Ahora era el turno de Chevy Negra que comenzaba con “Lo que sos”, tema que abre su primer disco (A Rodo Rock ‘N Roll, 2009). El sonido tenía la misma fluidez y calidad que la de Palenke, así que se podía apreciar el poderío de la banda y a su vez disfrutar sus canciones. Siguiendo con el mismo disco y con su orden, siguieron con “Me gusta el metal” para ahora tocar uno de los temas de su disco nuevo (Hacia las colinas) que fue uno de los motivos del show.
También siguieron el orden del disco y tocaron “Tiempo de whisky” y “Empezar de cero”. La gente se acercó más al escenario para poder acompañar a la banda con el canto y además de pedir algún que otro tema. Entre tema y tema, “Gau” Barrera fue agradeciendo a todos los que hicieron posible el show, como también a los amigos que se arrimaron a verlo, a sus compañeros de banda y asistentes, a músicos de bandas amigas (por ejemplo Walter Martínez de Vorax, Hugo Bistolfi de Rata Blanca, Horacio Pinasco de Kamikaze 4 y el “Yetty” de Hostil) y a algunas bandas como Apócrypha y Angorya.
Como dije al principio, la noche estaba compuesta por buena música, amigos y cerveza, lo que redondeaba un clima perfecto para rockear y liberarse de todas las preocupaciones cotidianas. Doblete de covers por parte de la chevy, primero con “Llegará a la paz” y “Abelardo el pollo”, ambos de Pappo. La gente conforme pedía más y tendría más, más rock. Para eso era invitada al escenario Jhoanna, para cantar junto a Gabriel dos temas del último disco: “Esta vida” y “Desatando el animal”. Muy buena voz la de Jhoanna, encaja perfecto con la melodía de las canciones y tiene unos tonos muy buenos. Si no me creen, compren el disco y saquen sus propias conclusiones. Más covers, en este caso de Riff. Todo bien con los covers, y más si están bien hechos como los hicieron los Chevy Negra. Pero yo quería que toquen más temas como por ejemplo “Dos monstruos” (el único que no hicieron del segundo disco) o Señorita Mar de Ajó del primer disco. Igual los covers venían bien ya que el sábado fue un aniversario más del natalicio de uno de los más grandes. Obviamente, estoy hablando de Pappo. El primer cover de Riff fue “Lily Malone”, el segundo “La voiture” (cambiando la letra por “súbete a mi Chevrolet”) y el tercero “No obstante lo cual”. Faltaba cerrar y redondear una muy buena noche, y para eso “Todo es cuestión” tomaba las riendas para ir marcando el final del show y darle paso a “El camino”. Antes del tema final, un sorteo para todos los presentes. Así es, por sólo $10 te daban rock, amigos, cerveza y sorteo ¿Qué más se puede pedir? En otros lados no te dan ni las gracias. El sorteo consistía en tres premios: una cerveza, una remera y un disco. Finalizado el sorteo y con los ganadores contentos por sus respectivos premios, la chevy finalizó su show con el tema que cierra el primer disco. “Sabes que” finiquitaba la noche y reflejaba lo que había sido (lean la letra y me van a entender). Un pequeño corte en el medio para que la banda sea presentaba y fin del show.
Palenke y Chevy Negra dieron dos excelentes shows, con buenas canciones propias, buenos covers y un sonido brillante. Ojalá que puedan seguir haciendo presentaciones como estas, que la gente se cope y apoye más a las bandas nuevas. Todo aquél que le gusta esta música puede disfrutar un buen show por una módica suma de dinero, antes de estar encerrado o yendo a cualquier lado que no sea de su interés.
Galería de Fotos:
Cobertura y Fotografías: Nicolás Lopez
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