AARON BEDARD (BANE): «ME SIENTO COMO EN CASA OTRA VEZ»

Bane se caracteriza por su gran energía y cercanía con el público. Es  una de la bandas más importantes de la escena hardcore y leyenda del movimiento Straight Edge. Don’t Wait Up (2014) fue su último disco de estudio. Dos años más tarde, la banda daría un parate por casi 10 años.

Fundada en 1995, Bane es la banda que redefinió el sonido del hardcore en los últimos 20 años. Se formó en Massachusetts como un proyecto paralelo entre Aaron Dalbec (por ese entonces en Converge) y Damon Bellorado. De cara a su Latin American Tour 2024 y su regreso a la Argentina, Aaron Bedard habló con Metal Argento sobre como es volver a los escenarios, cómo esta su salud y fundamentalmente como se siente la vitalidad del hard core a los 55 años, entre otras cosas.

Los liderados por Bedard y Dalbec tienen una cita con los argentinos el domingo 11 de Agosto a partir de las 19.00 horas en Uniclub, Guardia Vieja 3360, C.A.B.A. Las bandas invitadas serán Nunca Fue Fácil y Mariscal X.

Esta es la tercera visita de Bane a la Argentina ¿Recordas como fueron las anteriores?

A.B: Me confunden un poco las diferentes veces que hemos estado en Argentina. Recuerdo a la gente con la que rápidamente hicimos muy buenos amigos allí, algunos de ellos con los que todavía sigo en contacto y los extraño mucho. Recuerdo lo hermosa e interesante que era la ciudad y que me quedé absolutamente impresionado por lo buena que estaba la pizza. Y que me llevaron a ver a Boca vs River en La Bombonera y gano Boca; mirando desde detrás de la portería, el mejor ambiente que he visto en mi vida. Es decir, sentí la mayor pasión, amor y desesperación ese día, en ese estadio, de lo que jamás había sentido en mi vida. Nunca sentí lo mismo después de ese día: Béisbol, fútbol americano, baloncesto.
Por otra parte, recuerdo que 
los espectáculos fueron geniales. Por lo general, tocábamos en un lugar grande y elegante y al día siguiente en uno más pequeño que presentaban las bandas locales; más pequeño, con una sensación menos “profesional”, pero estaban allí para querer otro espectáculo. Había un gran sentimiento de amistad y familia entre las personas que formaban parte de la escena de Buenos Aires.  Sentía envidia de eso. Sinceramente, no sé qué esperar esta vez. Han pasado tantos años, todos hemos crecido. La vida cambia. Parte de lo que ha sido maravilloso y divertido de volver a estar juntos es no tener expectativas reales y abordarlo como si fuera todo nuevo.

¿Cómo viene siendo la gira hasta el momento? 

Todo bien por suerte. Terminamos una gira europea hace dos semanas, la primera en muchos, muchos años y fue muy divertida. Estábamos con nuestros viejos amigos de Comeback Kid y pasamos por algunas ciudades en las que no habíamos estado desde 2015 y también tocamos en algunos lugares muy interesantes incluyendo por primera vez un increíble colectivo punk en Zwiesel, Alemania, llamado Jugendcafe. Realmente no estábamos seguros de cómo sería volver a estar de gira después de tanto tiempo. Cómo se sentiría, cómo reaccionarían nuestros cuerpos. Pero al cabo de un día todos terminábamos riendo y sinceramente, parecía que nunca habíamos parado. Todo volvió a encajar en su lugar y me sentí como en casa otra vez. 

Bueno volvieron a salir de gira después de 10 años ¿Por qué ahora?

Siento que es diferente para cada uno de nosotros. Nuestras vidas siguieron adelante después de que Bane se separó. Crecimos, nuestras familias crecieron y nuestras carreras. Muchas cosas cambiaron, pero lo que permaneció igual fue nuestra amistad y extrañábamos tocar música juntos; y no cualquier música, sino nuestra música. Durante un tiempo comencé otra banda, Antagonize, pero nunca sentí lo mismo. Todo el tiempo me enfrenté a la idea de que no era la banda que realmente amo. Creo que todos sentimos eso un poco, que habíamos dejado una banda que era muy especial para nosotros y nos seguían diciendo lo especial que era para otras personas. Pasaron los años, el hardcore siguió adelante sin nosotros, pero estaba la sensación de que si algún día volvíamos, mucha gente estaría feliz por eso. Finalmente, el año pasado decidimos que era el momento.

Siento que la banda nunca termino. Sin embargo, creo que necesitaban un espacio después de tantos años de energía ¿Puede ser?

Lo que necesitaba era darme cuenta de lo que había perdido. Hay un dicho  «No sabes lo que tienes hasta que lo pierdes» y eso es lo que paso. 

Aaron, tengo entendido que sufrís problemas de salud en la espalda, en las rodillas. ¿Cómo te sentís ahora?

Por ahora las rodillas están bien. La gira que acabamos de hacer por Europa me tenía un poco preocupado sobre cómo sentiría mi cuerpo al tocar nuevamente todos los días, especialmente en mis rodillas. Este año hice mucho ejercicio, traté de fortalecerlas, prepararlos para lo que vendría. Hice mis estiramientos antes de cada show y mi cuerpo respondió bastante bien. No tengo la misma energía que tenía a los 20 años. Tengo que darme cuenta de eso, tengo que aceptarlo, aunque es difícil porque querés explotar, saltar y atravesar una maldita pared cuando estás arriba del escenario, pero también tenés que ser consciente de la necesidad de proteger, un poco, tu cuerpo. Una cosa que realmente he notado es que el cuerpo no se cura tan rápido como solía hacerlo en aquel entonces.

El hardcore esta asociado a la energía y a la juventud ¿Te sentís joven? ¿Lo ves como algo físico o mental?

Creo que nos corresponde a todos responder eso. Es fascinante porque es diferente para cada persona, algunas personas crecen muy rápido, asumen responsabilidades laborales reales a una edad temprana, comienzan carreras, forman familias y dejan de salir con amigos hasta las cuatro de la mañana. Tenes a otros que nunca se dan cuenta de esas cosas, los años pasan y todavía piensan, actúan y se visten como si tuvieran 18 años. Las cosas que más me importan son las que me importaban cuando era joven. No sé si ese trata de una forma “correcta” o “mejor”. Creo que en realidad se trata del individuo. El hardcore fue lo que me hizo sentir joven y cuestionar las ideas sobre el crecimiento. Vi como eran las vidas de los adultos, sus prioridades, sus rutinas, y nunca me pareció tan interesante como lo que tenía que ofrecer ser un niño duro, tonto, imprudente e irresponsable.

¿Hay canciones nuevas en camino? 

No, todavía no. En este momento siento que dudamos en volver a hacer música nueva. El último disco que hicimos fueron canciones de las que estábamos muy orgullosos y que requerían mucha energía emocional. Volver a esa mentalidad puede resultar desalentador. No hay que forzar esas cosas; mejor esperar hasta que estemos listos, pero espero que llegue ese día en el que volvamos nuestra atención en crear nueva música y volver a ese espacio de verdadera emoción y valentía. Creo que para que todo esto de Bane is back se sienta real, necesitaremos crear música nuevamente, porque esa es la parte más importante de estar en una banda: las cosas que haces, las cosas que decidís decirle a los demás, al resto del mundo. 

Por Jonatan Dalinger 

 




CON VISTAS A LO QUE SE VIENE. Descarnado junto a Monje y Geminis – Uniclub (26-07-2024)

Descarnado continuó con la despedida de lo que fue su último lanzamiento Enajenación el viernes 26 de julio, en las inmediaciones del Abasto, mas precisamente en Uniclub. Para la ocasión las bandas en acompañar a los oriundos de Isidro Casanova, fueron Geminis y Monje.

Los primeros en salir a escena fueron los chicos de Geminis, con su hardcore de zona norte. La banda viene de compartir un split, el año pasado, con Stryker y Lagrima titulado Triple Amenaza. Además, también el año pasado, lanzaron el ep Peores Deseos. Con Nico Vulgar al frente, arengando y manijeando a los presentes, la banda se despachó con un hardcore tradicional y noventoso, levantando a los primeros en acercarse al recinto y dejando caliente las tablas para lo que vendría.

Luego fue el momento de Monje. La banda supo tener la etiqueta de doom, pero lo cierto es que hoy en día va mas allá de eso. En su música podemos encontrar, además del doom característico de ellos, death, sludge, lentitud y velocidad. Su último trabajo, Culto al Fin de Los Tiempos, vio la luz el año pasado. Así mismo, la banda viene de importantes presentaciones entre las que se destaca haber compartido escenario con The Obsessed. Con Matías Ibañez en voces desde el 2021, la banda cuenta con un frontman notable, comentando, bromeando e interactuando con el público constantemente, además de su versátil voz y sus distintos podridos y guturales. La noche se fue llenando, además de gente, de riffs pesados y contundentes.

Finalmente, Descarnado piso el escenario para darle el adiós definitivo a Enajenación y así brindar su último show antes del lanzamiento de lo que será su nuevo material. La formación fue la de siempre, con el distintivo que Ivan Suarez no se colgó la guitarra en ningún momento, encargándose únicamente de las voces. La banda desde sus inicios buscó la calidad en sus trabajos. Además de lo que hacen como músicos, todos virtuosos es evidente, buscan llevar sus presentaciones en vivo un paso mas allá de los estándares. Desde los equipos, innovaciones tecnológicas, hasta la iluminación que presentan. Este último punto, se destacó por completo, al menos para quien escribe, en la noche del pasado viernes. Las luces presentes, al mando de Fernando Fasano, deslumbraron y tuvieron un nivel digno de las bandas que vienen de afuera, e incluso mejor que muchas de ellas. Por su parte la banda despidió su trabajo recorriéndolo y adelantó cosas de su futuro material.

Descarnado despidió su último disco, para darle lugar a su próximo trabajo, que verá la luz a fin de año. La noche fue completa, diferentes estilos, mucha gente presente y una constante que fue el riff; mas lento, mas rápido, mas podrido o menos podrido, pero el riff y la comunión entre amantes de la música pesada.

Cronista: Juan Cordiviola




INFECTED RAIN LLEGA POR PRIMERA VEZ AL PAÍS EN NOVIEMBRE

 Infected Rain se ha convertido en un nombre destacado en la escena del metal, especialmente conocido por su combinación única de diferentes géneros musicales. Su música resuena en una amplia audiencia.

 El cuarteto moldavo ha mostrado un ascenso constante en el mundo de la música desde que se lanzó su álbum debut Asylum en 2011. Desde entonces han seguido evolucionando, tanto en el sonido como en su enfoque de la música.

 Su último álbum, TIME, lanzado a principios de 2024, marca su sexto álbum de estudio y muestra su capacidad para experimentar con una variedad de sonidos y temas, consolidando aún más su estatus en el panorama del metal moderno.
 Cada álbum es un viaje a través de una variedad de emociones intensas, capas musicales complejas y exploraciones temáticas que reflejan experiencias tanto personales como universales.

 La banda liderada por Lena Scissorhands llega por primera a nuestro país para presentar su más reciente álbum y repasar todos sus clásicos. La cita será el próximo jueves 7 de noviembre y tendrá lugar en Uniclub a partir de las 19 horas. Los locales Darlotodo serán los encargados de abrir la noche.

Las entradas anticipadas ya se encuentran a la venta a través de AlPogo mientras que los puntos de venta físicos son Tienda Noiseground, Locuras y Engendro Tienda.

 




BANQUETE MUSICAL PSICODELICO. Buffalo, Sangre de Barro y Satan Imperial – Club V (26-07-2024)

Buffalo, Sangre de Barro y Satán Imperial se presentaron el pasado 26 de julio de 2024 en un Club V a tope de la capacidad de gente. Las tres bandas crearon una atmósfera vintage con un sin fin de emociones de principio a fin.

Satán Imperial fue la primera banda en salir al escenario pasados 5 minutos de las 00:30 hs ante un club V colmadísimo. El inicio del show fue mucha contundencia; el humo reinante aclimató la noche transformándola en psicodelia pura. Los riffs pesados y los cambios de ritmos impactaron en la gente que algunos agitaban sus cabezas y otros se atrevieron a mover los pies al compás de los instrumentos. En la mitad del show, la banda sorprendió con un cover de Los Redonditos de Ricota, «Semen-Up», que volvió locos a la monada además de los temas de su primer trabajo discográfico homónimo. Se notó a las claras la experimentación de la fusión entre lo progresivo y doom metal.

Sangre de Barro fue la segunda banda en presentarse. La particularidad de este power trio es que está formado por tres viejos conocidos del under: Juan Marcos en guitarra y voz (Sutrah), Seba Romani en batería (Narcoiris) y Cobra Rod en el bajo (Poseidotica). Ellos nos vinieron a deleitar con su disco debut homónimo. El arranque fue con uno de los singles, «Mundo Actual», para continuar con «La Gran Ausencia». A medida que transcurrían los minutos, el clima se ponía más festivo, descontracturado para dejar volar la imaginación. A la mitad del show nos deleitaron con ‘Fuga» e interpretaron su segundo corte de difusión «Las Aguas Bajan Turbias». El stoner estaba en su plenitud y el público lo hizo notar agitando en cada nota. El final fue con «Creadores del Desastre» y «Traidores»

Por último, el plato principal, el más esperado. Buffalo se presentó pasados 20 minutos de las tres de la madrugada para cerrar una noche con distintos matices musicales. La banda vino a ratificar su gran momento. Pastor en la guitarra y voz fue el artífice de interactuar con la gente. Hicieron un amplio set de 13 temas con un público expectante de principio a fin. El inicio de la ceremonia fue con «Rio Arriba y «Los Días Lentos». Ante cada tema Pastor iba preguntando ‘¿Cómo están ahí?’ , ‘¿Se escucha bien?’, ‘¿Seguimos o nos vamos?’. La respuesta de la gente no se hizo esperar y fue un rotundo «No» a que no se vayan. En la mitad del show interpretaron «Magia Negra» y «Pescando». El cantante nuevamente se dirigió a la gente y manifestó ‘¿Hacemos uno lento o uno rápido?’ ‘¿Uno picante lento o picante rápido?’. La gente ya estaba en éxtasis total y lo que querían es que se ejecuten los instrumentos una y otra vez. En tono de broma preguntó a Florencia Tropea responsable de Terror Producciones ‘¿Flor estamos bien con el tiempo? ¿Seguimos hasta el amanecer?’ A lo que estas preguntas exaltaron a la gente. Y para cerrar una gran noche a horas de la salida del sol, lo hicieron con «Sabia» y «Sobre Mí».

Una noche psicodelica en lo que el doom, stoner y el rock progresivo fueron un banquete musical en el comienzo de un nuevo fin de semana.

Por Sergio Silva
PH: Cecilia Principe

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BEYOND THE BLACK DEBUTA EN ARGENTINA EN 2025

Por primera vez llega a la Argentina Beyond The Black, la banda alemana de metal sinfónico. La cita es en Teatro Flores, Avenida Rivadavia 7806, CABA el viernes 2 de mayo 2025. Como bandas invitadas nacionales figuran Liliumdust y Boudika.

La banda alemana de metal sinfónico, Beyond the Black, está recorriendo una historia fenomenal. Todo comenzó con su álbum debut en Songs Of Love And Death  (2015) fue un éxito  instantáneo y se mantuvo fuerte en el top 15 alemán durante semanas. Además, fueron  galardonados con el Metal Hammer Award 2015 por mejor debut. Su sucesor Lost In Forever (2016) entró en las listas alemanas en el puesto número cuatro de inmediato y allanó el camino para  una gran gira que llevó a la banda alemana a países como el Reino Unido, Rusia y Japón. Desde  el debut en vivo de la banda en 2014, han tocado varias veces en el festival de metal más grande  del mundo, Wacken Open Air, y han realizado giras como teloneros de pesos pesados como Aerosmith, Korn, Scorpions, Saxon o Within Temptation. En el transcurso del lanzamiento del tercer álbum Heart Of the Hurricane, Beyond the Black absolvió a su primera gira europea en  otoño de 2019, que consistió en más de 20 espectáculos en 10 países, la mayoría de ellos con  localidades agotadas. La banda no se detuvo allí y regresó al estudio para  escribir el cuarto disco. El muy esperado Horizons fue lanzado en junio de 2020 y entró en las  listas de álbumes alemanas en el puesto #3 (República Checa #6, Austria #16, Bélgica #53). La  pandemia llevó a un descanso obligatorio, pero el grupo se mantuvo creativo y regresó con una explosión en 2022, más fuerte que nunca: después de la gira europea más exitosa hasta  la fecha en el otoño de 2022, su quinto álbum de estudio, homónimo Beyond the Black, se lanzó en enero de 2023. Se posicionó en varios países (Dinamarca #2, Reino Unido #2 Rock,  República Checa #6, Austria #12, Suecia #12, EE. UU. #7 Top Artistas Nuevos) y marca el lanzamiento de álbum más aclamado de la banda hasta ahora. Durante una gira exitosa de  festivales de verano en 2023, Beyond The Black acaba de anunciar su próxima gira europea  titulada Dancing In The Dark a partir de abril de 2024 y primera gira por Latinoamérica.

Las entradas para para el debut de Beyond the black están disponibles por sistema passline. Y sin service charge en:

DISQUERIA BVM RECORDS: Avenida Cabildo 2136 1er piso Local 149 CABA. Galería
Recamier lunes a sábados de 11 a 19 hs.
LIVERPOOL ROCK SHOP: Avenida Cabildo 2136 1er piso Local 147 CABA. Galería
Recamier lunes a sábados de 11 a 19 hs
URQUIZA MOTOS: Av. Cabildo 4674, Nuñez, CABA.

CON RECARGO en:
METALMANIA: Lavalle 669 – Loc 9 CABA. Galería Luxor. (Con recargo).
ENGENDRO TIENDA: Las Flores 341 – Wilde Centro. Lunes a sábados de 10 a 13 / 15 a 19 hs




EL QUE AVISA NO TRAICIONA. Darlotodo – Uniclub (21-07-2024)

La joven banda Darlotodo presentó de manera oficial su trabajo debut, homónimo, el domingo 21 de julio ante un Uniclub colmado de gente. Tal y como reza su nombre, la banda no se guardó nada: vestuarios, movimientos, luces y puesta en escena, dieron forma a una gran noche.

Curioso a mi parecer fue no contar con bandas invitadas para amenizar la previa. En su lugar, se optó por un set ligado al nu metal, de la mano de Penumbrart, baterista de la banda. Apenas pasada las 21 horas, con una gran cantidad de público presente, las luces se apagaron y el humo invadió el recinto.

La banda tiene gran presencia en el escenario. Desde las vestimentas, que nos remiten a los 2000s con camisetas de fútbol americano, bermudas anchas y bandanas, hasta los movimientos de cada uno de sus músicos que no dejan de moverse, saltar o arengar al público. En la guitarra, Rod Zamora que desde su rincón en el escenario, agitó su guitarra y su cabeza constantemente. Juan Francisco Massot, con su bajo disparaba notas graves, a la vez que saltaba y giraba sin cesar. El antes mencionado Penumbrart, detrás de los parches, también muestra su presencia y el frontman de la banda, el conocido Lucas Aguirre, el encargado de los gritos mas desgarrados y de las notas mas melódicas.

Por mas nueva que sea la agrupación, Darlotodo suena ajustada, firme y denota conexión entre sus miembros. Gran sonido, fuerte, pero claro. Gran juego de luces, de la mano de Fernando Fasano, conocido por trabajar con bandas como Massacre, Arde la Sangre y Nvlo.

Además de recorrer el flamante disco debut, la banda realizó diferentes covers, como por ejemplo «Primavera 0» de Soda Stereo, «One Step Closer» de Linkin Park o «Blind» de Korn. Para el momento de «Dolor», Leon Pardo, de Nvlo subió a cantar junto a Aguirre. Para finalizar, Darlotodo cerró con el tema que abre la placa, «La Venganza», poseedora de un estribillo que queda resonando y resonando.

Así paso la presentación oficial de Darlotodo, el flamante disco debut de músicos experimentados y con presencia en la escena. No por nada eligieron ese nombre, avisaron, exigieron al público darlo todo y todo fue una fiesta.

Cronista: Juan Cordiviola

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FESTIVAL DEL INFIERNO. Hellfest – Clisson (27, 28, 29, 30-06-2024)

Clisson es un pueblo de 7000 habitantes en el oeste francés, que con su castillo y su iglesia centenaria puede decir que tiene sus atractivos turísticos. Pero el mayor de todos es un evento que se da cada año con la organización del Hellfest, uno de los festivales de heavy metal más grandes del mundo. En 2023 atrajo casi 200.000 personas, y en la edición de cuatro días realizada entre el 27 y 30 de junio de 2024 cabría esperar una cantidad similar
de gente.

A las 16:30 del 27 de julio, el primer escenario tendríamos a Asinhell, este proyecto liderado por el guitarrista Michael Poulsen, el cantante Marc Grewe y el baterista Morten Toft Hansen. Death / thrash de la vieja escuela, sin pretensiones más allá de la de darle una inyección de adrenalina a un público que buscara riffs como para justificar armar un mosh, con mucha gente saltando e incluso armando circle pits. Un buen comienzo. En el primer escenario a las 18:00 pudimos ver a los enmascarados rusos Slaughter To Prevail, capitaneados por el cantante Alex Terrible y su máscara demoníaca dorada. STP es una de esas bandas donde la idea detrás del grupo es más atractiva que la práctica: esta especie de deathcore cavernícola tiene mucho para entretener, como queda obvio con ya clásicos como “Demolisher”, “Baba Yaga” y “Viking”, pero en estudio el puñado de buenos tracks queda sepultado debajo de demasiado material que me deja tibio. Por suerte, en vivo STP tienen la posibilidad de elegir las mejores instancias de su catálogo y en el escenario del Hellfest lo hicieron de manera efectiva, con la gente acompañando a Alex con sus
brutales gritos guturales en las canciones antes mencionadas y en otras como “CONFLICT” y “Kid of Darkness”. Ojalá mejoraran en estudio, porque en vivo con STP se pasa un buen rato.

Nos dirigimos al primer escenario para ver a Kerry King, quien fuera uno de los amos y señores de los riffs en Slayer y ahora se centrara en su carrera solista. Claro, el tema acá es que From Hell I Rise, su álbum debut, es un disco al que no le tenía mucha fe en las semanas previas a su salida y un par de escuchadas confirmaron mis sospechas, con
muchas de las canciones sonando como descartes más o menos pulidos de canciones de los últimos trabajos de Slayer. Pero eso es en estudio, y en vivo quedaba ver cómo salían las cosas. Obviamente la mayor parte de las canciones de las presentación de King en el Hellfest salieron de su disco debut, porque tiene que demostrar que hay vida después de Slayer, pero queda claro que la enorme mayoría de los asistentes estaban ahí para escuchar los clásicos. Es así que entre instancias como “Shrapnel” y el tema título “From Hell I Rise” también pudimos escuchar “Black Magic” y el clásico inmortal “Raining Blood”, con Mark Osegueda demostrando en las voces que tiene la suficiente espalda como para encargarse de todas estas canciones sin despeinarse. Mucho circle pit y pogo, aunque ya para las 19:30 el cansancio de muchos en el público era visible, con muchos puños extendidos y cabeceos discretos. A las 21:25, el primer escenario tenía todo el campo colmado para ver a las que de seguro eran las mayores estrellas de este primer día del Hellfest 2024, con Megadeth tomando por asalto el escenario. Déjenme decir que Dave Mustaine me parece una de esas personalidades que dividen al mundo del metal: resentido, peleador, ególatra… E indudablemente un compositor tocado por la varita y uno de los guitarristas más icónicos de la música pesada. Su habilidad con las seis cuerdas ya está clara, pero el pelirrojo siempre la tuvo complicada con las voces: nadie va a negar que es por lejos el peor cantante del Big 4 del Thrash, ni siquiera él. Pero ya con esas expectativas, su voz se escuchó en forma para todos los que ya sabíamos cómo suele sonar arriba del escenario, sobre todo en “Skin O’ My Teeth”, y por suerte el bajista James LoMenzo y el recientemente llegado guitarrista Teemu Mäntysaari acompañan con coros para aliviar la carga del eterno líder de Megadeth, mientras Dirk Verbeuren es un reloj suizo detrás de la batería. Que las canciones estuvieran con la afinación más baja también ayudó. Más allá de los temas vocales, que era lo que se esperaba, el set del cuarteto fue imparable: a pesar de ser de sólo una hora, pudimos escuchar “Tornado of Souls”, “Symphony of Destructions”, “Holy Wars”, “Mechanix” y demás clásicos eternos del thrash, con un par de canciones del último The Sick, the Dying… and the Dead! como para balancear las cosas e incluso sumando “Kick The Chair”, canción que no tocaban en vivo hace década y media. No creo que alguien se haya ido insatisfecho, con el público frente a la imagen de Vic Rattlehead extendiéndose hasta donde alcanzaba la
vista. Las cosas en este primer día podrían haberse terminado ahí para el metalero más tradicional, pero en el escenario principal quedaba un grupo más por presentarse. Al segundo día y pasado el mediodía nos dirigimos al primer escenario para ver la presentación de las japonesas Lovebites. Siendo esta su primera presentación en el Hellfest y con un público bastante grande, el grupo se centró en este último disco durante su corto
set de media hora, con Miyako y Midori sacándose chispas en las guitarras y la base instrumental de la bajista Fami y la baterista Haruna dándolo todo en “Holy War”, “The Hammer of Wrath” y “Soldier Stands Solitarily”, por nombrar un par. La cantante Asami no tendrá la mejor pronunciación del inglés pero demuestra su potencia en cada canción,
encima teniendo que hacer lo suyo con ese vestido enorme de gala con el peligro que conlleva la temperatura en esta temporada. Un espectáculo corto pero muy correcto. Orden Ogan le pusieron algo de power al Hellfest. Incluso bajo el sol directo la gente agitaba con cada canción de los alemanes, ya fuera saltando con cada nota de canciones
como “Heart of the Android” y “The Order of Fear”, o como hicieron en “Let The Fire Rain” donde se pusieron a “remar el barco vikingo”, esa alternativa al mosh inventada en los recitales de Amon Amarth. Más allá de eso, la banda se escuchó correcta y con un buen setlist, con ese power metal que da ganas de ponerse a practicar los agudos y dándome ganas de chequear el álbum que sacarán en un par de días.

Tras una caminata al escenario Altar nos preparamos para ver a Ne Obliviscaris, la gran esperanza del progresivo extremo en esta era post Opeth abandonando el death. Los australianos dieron un set de apenas cinco canciones, pero si consideramos que sus composiciones frecuentemente superan los diez minutos entonces tiene mucho más
sentido. Durante esa hora tocaron “Equus” y “Suspyre” del último Exul y luego una de cada uno de sus otros tres álbumes, Mucho riff retorcido, contraste de voces entre los rugidos de Xenoyr y las voces limpias de Tim Charles y obviamente los acompañamientos de violín de este último, uno de los elementos esenciales de la fórmula de la banda. Desde ya que todos los músicos sonaron sólidos, con el público acompañando de manera discreta pero
respetuosa: ya con diez horas de festival encima, muchos se veían bastante cansados. A las 20:45 en el primer escenario teníamos a Tom Morello comenzando su primera aparición en la historia del festival. El guitarrista de Rage Against The Machine es uno de esos magos de la guitarra que influenció a millones, pero como solista tengo que decir que su saga The Atlas Underground son tres de los discos más inescuchables que haya tenido que soportar: la combinación de sus ruidos guitarreros y cosas como dubstep y trap simplemente no funciona. Por suerte Morello sólo tocó tres canciones de esos discos, con el resto del set siendo variado: “Soldier in the Army of Love” (con la que arrancó el recital y es el adelanto de su primer disco solista “rockero), “One Man Revolution” (de su alter ego folk
The Nightwatchman), el clásico “Like a Stone” de Audioslave, “Gossip” de Måneskin (canción en la que aparecer como invitado), covers de MC5, Bruce Springsteen y John Lennon, y obviamente varias seguidillas de tracks de RATM, que tuvieron a todos saltando y bailando incluso si estuvieran en las antípodas de las ideas políticas de Morello. En el escenario Temple, los noruegos Satyricon hacían ya su sexta aparición en la historia
del festival, pudiendo contarse junto con Napalm Death entre los grupos con más participaciones en el Hellfest. Más allá de eso, no hay mucho que decir de especial acerca de lo que fue la presentación del grupo comandado por Satyr: tan sólidos como se debería esperar de una banda con tanta experiencia, y centrándose en clásicos como “Mother
North”, “Forhekset”, “K.I.N.G” y demás tracks que un fan de la banda puede recitar de memoria sin mucho esfuerzo.
Ya la 1:00 de la mañana en el escenario Temple era hora de sumirnos en la oscuridad de mano de Anaal Nathrakh. La combinación de black metal, grindcore y metal industrial de la banda es única: recuerdo un comentario diciendo que su debut The Codex Necro no sonaba como un disco sino directamente como un exorcismo. Durante muchos años el dúo conformado por el cantante V.I.T.R.I.O.L. y el multi instrumentista Irrumator dijo que no iba a
dar presentaciones en vivo seguramente por algo sobre las dificultades de trasladar lo hecho en estudio al contexto en vivo, pero eventualmente encontraron la manera y ahora ya es la cuarta vez que se presentan en el Hellfest, con el logo puntiagudo de la banda como única decoración arriba del escenario. V.I.T.R.I.O.L a primera vista no parece el tipo más pesado, hasta que abre la boca y deja salir su demonio interno en himnos de brutalidad, violencia y oscuridad como “In the Constellation of the Black Widow”, “Bellum Omnium Contra Omnes”, “Obscene as Cancer” y “Feeding the Death Machine”, entre otras. Mosh brutal, headbanging y demás, fue en la final “Submission is for the Weak” donde se armó el mayor wall of death de la noche, con V.I.T.R.I.O.L alargando la canción antes de dar la
señal para el comienzo de la brutalidad con el inmortal “Die on your knees!”. Un gran set para quemar los últimos cartuchos de energía de la noche, e irnos a nuestros aposentos para prepararnos al día siguiente, con el cuerpo dolido pero contentos por lo que habíamos pasado.

Ya para el tercer día el ritmo del Hellfest nos estaba cobrando factura, pero teniendo la oportunidad de estar en semejante festival no nos íbamos a quedar sin disfrutar cada fecha del mismo al máximo de lo que pudiéramos. Así que reunimos fuerzas y el sábado 29/06 nos dirigimos a los terrenos del festival para continuar con nuestras experiencias metaleras. Para ir calentando el ambiente en cuanto a heavy metal de tintes épicos en el Mainstage 2,
los estadounidenses Eternal Champion hicieron presencia con un escenario prácticamente pelado, sin siquiera el logo de la banda en la pantalla superior. Pero el cuarteto demostró que no necesita nada de ello (a pesar de que escuchando sus discos me imaginaba una escenografía a lo Amon Amarth) y tuvo al público rememorando los días de aventura y espadas a través de un setlist dedicado en partes iguales a sus álbumes The Armor of Ire y Ravening Iron. Canciones como “Coward’s Keep”, “The Last King of Pictdom” y “Skullseeker” fueron inyecciones de adrenalina y testosterona para el público, con Eternal Champion demostrando que son de las bandas más importantes del heavy metal épico de los últimos años.

Claro que después de la fantasía, de vez en cuando no viene mal un golpe de realidad, para lo que fuimos al escenario Warzone para una dosis de punk rock de la mano de The Casualties. Desde hace unos años los punks están sin su figura más representativa, con el cantante Jorge Herrera habiendo anunciado su salida (en buenos términos) en 2017, siendo el último miembro de la formación original todavía en la banda. Ahora con el guitarrista Jake Kolatis como miembro más longevo, habiendo entrado tres años después de su formación, el cuarteto se dedica a mantener el legado de estas leyendas del punk callejero, y no lo hacen nada mal con David Rodríguez en el micrófono: “1312”, “Punk Rock Love”, “Ashes of My Enemies”, “My Blood, My Life, Always Forward”, toda una seguidilla de canciones
perfectas para tener al público haciendo mosh, y la banda suena tan prolijamente desordenada como de costumbre.
De vuelta en el Temple, los islandeses Skálmöld trajeron la era vikinga a Francia con su set. A diferencia de muchas bandas de “viking metal”, Skálmöld no tienen problemas con acelerar en sus canciones, como se puede escuchar en el medio de la épica “Miðgarðsormur”, y logran dar un espectáculo interesante con su interpretación de este
sonido, con todos los integrantes aportando sus voces y dando como resultado una experiencia como para que el público también cante a coro… siempre y cuando sepan algo de islandés, claro está. “Verðandi”, “Kvaðning” y otras canciones completaron un buen set de parte de los oriundos de Reykjavík. A las 21:45, con la noche bien entrada, en el Valley pudimos ver a Mr. Bungle, que dieron un concierto a la altura de su particular leyenda como promotores de la locura musical. La banda de Mike Patton, Trey Spruance y Trevor Dunn, ahora acompañados por nada menos
que Scott Ian (Anthrax) y Dave Lombardo, es de tocar una mezcla de canciones propias, covers y algo que podríamos llamar “reversiones” en sus conciertos: es así que arrancan con “Satan Never Sleeps” de la cantante de los sesentas Timi Yuro, seguida por “Anarchy Up Your Anus” y también incluyendo “Spreading the Thighs of Death” y “My Ass Is On Fire”, para meter también un “Habla Español o Muere” reversionado como “Speak French or Die”
para la ocasión. También tuvieron a Wolfgang Van Halen como invitado en “Loss of Control” de Van Halen y a Andreas Kisser en “Territory” de Sepultura. Cerrando con una sarcástica “All By Myself” de Eric Carmen reversionada como “Go Fuck Yourself”, el humor extraño de la banda se mezcló con su música cambiante y experimental.
Ahora, está clarísimo que el plato fuerte de este tercer día del Hellfest se iba a dar en el primer escenario a las 22:45 con nada menos que Metallica tomando por asalto el escenario: te gusten o no los últimos discos de Hetfield-Ulrich-Hammett-Trujillo, está claro que son la banda más convocante del heavy metal, de esas que le llegan incluso a gente
que no escucha a ninguna otra banda en el estilo. Pero también está claro que no hay mucho nuevo que se pueda decir acerca de un concierto de Metallica: entrarán con la inmortal “Ecstasy of Gold” de Ennio Morricone dándole ese toque épico al inicio del recital, “Creeping Death” tendrá a la gente coreando cada línea como un himno y lo mismo se podrá decir de “Hit The Lights”, “For Whom The Bells Tolls”, “Nothing Else Matters” y cualquier otro clásico enorme de la banda, mientras que las más nuevas como “72 Seasons” y “Lux Æterna” tendrán un recibimiento que podríamos llamar “aceptable”, pero sin encender a la gente como las otras. James Hetfield hará lo suyo cargándose al hombro la tarea de comunicarse con la gente, Ulrich hará su tarea decente como baterista, Hammett hará sus solos y Trujillo seguirá estando demasiado sobrecalificado para su tarea como bajista como si Jaco Pastorius tocara con los Ramones. No necesitan leer todo esto para saber lo que pasó: fue un recital de Metallica y eso es lo que importa. Ya entrada la medianoche, cerrábamos este tercer día con un par de presentaciones
nocturnas. Nos dirigimos al Valley para presenciar a Julie Christmas, la cantante estadounidense conocida por su paso por bandas como Made Out Of Babies en el post hardcore y Battle of Mice en el sludge metal. Sin embargo, alcanzó gran reconocimiento con Mariner; el álbum que lanzó en colaboración con los postmetaleros suecos Cult of Luna en 2016, y ahora presentaba Ridiculous and Full of Blood, su aclamado nuevo álbum solista.
Comenzando con el cover de “Bones In The Water” de Battle of Mice, Julie se centró principalmente en su nuevo trabajo, ofreciendo una muestra de riffs ruidosos y ritmos lentos acompañados por sus poderosos gritos y su presencia destacada en el escenario, resaltada por su movimiento y su vestimenta, incluyendo una máscara que brillaba en la oscuridad. Temas como “Thin Skin”, “The Ash” y “Silver Dollars” demostraron que Julie Christmas
ofrece brutalidad sin ser monótona, ruido sin aturdir y atmósferas sin aburrir. El entusiasmo del público fue evidente, con una buena cantidad de personas que optaron por esperar hasta la medianoche para verla en acción.

Para el último día del Hellfest, era hora de ponernos retro con los suecos Blues Pills. Hay algo en la fórmula del cuarteto que los hace sonar viejos pero refrescantes al mismo tiempo: mezclar blues y rock pesado está muy lejos de ser algo nuevo, pero la dosis de soul que la voz de Elin Larsson le inyecta al sonido de la banda le da esa identidad que a tantos grupos de esta movida de rock retro del falta. Blues Pills nos deleitaron con tracks como “Proud
Woman”, “High Class Woman”, “Little Sun” y los adelantos “Birthday” y “Don’t You Love It” de Birthday, el álbum que lanzarán en agosto. Con mucha energía garagera y esos riffs valvulares clásicos, los suecos dejaron una sonrisa en todos los presentes. Enfilando al Valley estuvimos en el set de Therapy?, los rockeros norirlandeses que regresaron al Hellfest tras una década. Los comandados por el cantante / guitarrista Andy Cairns y el bajista Michael McKeegan tomaron control del escenario con sus riffs erráticos y ruidosos. Con una mayoría de canciones salidas del clásico Troublegum pero también un par del reciente Hard Cold Fire, el trío dio una actuación de rock energético: seas punk, metalero o alternativo, Therapy? es la clase de banda que le puede llegar a todo el mundo,
como se evidenció con la gente cabeceando clásicos como “Knives”, “Screamager” y “Die Laughing”. Para aclarar las cosas, el Batushka que se presentó en el Hellfest es la de Drabikowski, la que es considerada por la enorme mayoría del público como la versión legítima y la que ganó en el juicio entre ambas partes. Con eso aclarado, es raro ver a este grupo tan particular en un escenario tan grande y abierto como el del Temple: ese black metal con temática de Iglesia Ortodoxa Rusa no se termina de adaptar a semejante ambiente, más dado a la intimidad y hermetismo de un lugar cerrado. Pero la potencia de los riffs sigue estando, más allá de que no fuera el mejor contexto. Esperemos que los problemas legales terminen por solucionarse para así tener nuevo material de esta banda tan interesante. Cerrando las actuaciones en el Valley tuvimos a Rival Sons, el cuarteto estadounidense que ha cautivado a muchos fans del rock retro con su hard blues con algún que otro tinte psicodélico, sobre todo en el Lightbringer editado el año pasado, y que me la paso confundiendo con Royal Blood por alguna razón, que encima también se presentaban el
mismo día. La banda desplegó un setlist variado, mezclando clásicos como “Secret”, “Electric Man” y “Pressure and Time” con las más nuevas “Mirrors” y “Nobody Wants To Die”, aunque estas dos últimas serían las únicas de sus dos discos del 2023. Más allá de esos detalles, el de Rival Sons fue un gran set de blues rock enérgico y, ciertamente, bien
vestido, con la oscuridad del domingo ya haciéndose evidente. Y ya para cerrar todo de una vez por todas, a las 23:00 Dimmu Borgir tomaron control del Temple. Aunque al principio el micrófono de Silenoz estaba directamente apagado al comenzar “Raabjørn speiler draugheimens skodde”, el problema técnico se solucionó rápidamente, dándonos la oportunidad de disfrutar la potencia de la banda en vivo. Está bien, admito que Dimmu Borgir no es la banda más respetada por el fan “kvlt” del black metal, pero queda claro que el espectáculo del sexteto es extremadamente profesional, y los teclados cursis son mi debilidad, perdonen. Así pasaron “Progenies of the Great
Apocalypse”, “Spellbound (by the Devil)” y “The Insight and the Catharsis” por nombrar algunas, con los clásicos como el fuego saliendo de las plataformas en el frente durante “Council of Wolves and Snakes” y Silenoz siendo mucho más comunicativo y hasta diría carismático que el frontman promedio del black metal. Y el público respondió con mucho entusiasmo, con mucho headbanging casi sincronizado y hasta haciendo crowdsurfing. A los noruegos no se les perdonará el que le llegaran a un público por fuera del black metal, pero han aprovechado los medios para dar un buen espectáculo. Fue así que llegamos al final del Hellfest, retirándonos del lugar para ir al hotel y tener el
equipaje ya preparado para irnos temprano en la mañana del lunes. Más allá de quedar con el cuerpo adolorido y la mente un tanto aturdida después de tanta música a todo volumen, fue bueno poder experimentar uno de los mejores eventos de la música pesada mundial. Y, obviamente, esperamos poder repetir en el 2025.

Por Priscilla Boisguerin
PH: Paul Bouaziz

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ARMADO Y PELIGROSO. Neil Turbin – Uniclub (19-07-2024)
Con la constante oferta de shows internacionales que está recibiendo nuestro país es interesante ver la variedad en calidad y estilos que uno se puede cruzar. Cada tanto aparece alguna perlita de culto como el caso de Neil Turbin, cantante de la primera época de Anthrax, en su debut en Buenos Aires con el 40 aniversario del seminal Fistful of Metal (1984) como motivo del tour. La baja temperatura y probabilidad de lluvias no evitaron que los amantes de la velocidad se apersonaran en el local del Abasto tras la promesa de un recital para unos pocos elegidos.

La banda encargada de romper el silencio fue Zarkas, una joven agrupación que hace gala de un aguerrido thrash metal, pero que lamentablemente no pudieron hacer lucir del todo debido a las inclemencias de una mezcla sonora poco favorable. Nómade tomó el segundo lugar en la grilla, agregando un poco más de variedad con su estilo thrashero, pero con reminiscencias del death metal melódico de Gotemburgo (con At The Gates como primera referencia que se viene a la cabeza). Tocaron varios números recorriendo sus 20 años de trayectoria, con la crítica social como principal tema lírico, recibiendo gran respuesta del público. Mientras poco a poco ingresaba más gente al UniclubDesygnio también tuvo que luchar con un sonido que no se terminaba de ajustar, afectando directamente a su peculiar estilo. Mientras los momentos más pesados perdían la fuerza de las guitarras en la mezcla, en los momentos más calmos, el teclado sobresalía demasiado, dejando poco lugar a la apreciación del estilo progresivo de la banda. Una lástima. Alrededor de las 20:45 Violent Execution tomó por asalto el escenario, mostrando el poder de su ajustado crossover thrash, tal vez la única banda soporte que sonó apropiadamente. Abrieron el set con «Invasores», «Violentos Ejecutivos» y «Carpinchos vs Tinchos», subiendo la temperatura a base de riffs y gang vocals. Criticando a nuestro payasezco primer mandatario, irrumpieron con «Pubertarios» y «Desaparecidxs», brindando la crítica política que toda banda thrash que se precie de tal debe tener. Siguieron con algunos temas más de su repertorio entre los que se destacaron «Sensación Mosh» y «C.D.D.», invocando el costado más fiestero del género, dejando todo listo para el plato fuerte de la noche.

Los primeros acordes de «Give Them Hell» sonaron mientras se hacía presente el hombre de la noche, Neil Turbin, mostrando un buen estado en sus cuerdas vocales. Acompañado por los músicos de Desygnio, el americano no dudó en comenzar el homenaje a «Fistful of Metal», hilo conductor de todo el show, a través del temazo «Death From Above». Así se sucedieron, entre comentarios jocosos de Turbin y poca respuesta de un público que tardó en engancharse, hits de la B como «Across The River / Howling Furies», «Subjugator», «Soldiers of Metal» y el cover de Alice Cooper, «I’m Eighteen» (de lo más festejado). Ya metido en su papel de stand-upero, Turbin no duda en tirar un poco de shade a sus ex compañeros al tocar una memorable versión de «Armed And Dangerous», esa gema total que marcó el ingreso de Joey Belladonna al grupo neoyorkino en 1985. Tras un par de pasos de comedia más (Turbin mencionó la aparición de «Fistful…» en un ranking de las peores portadas de discos de la revista Rolling Stone como «una medalla de honor»), un par de correcciones a los músicos y el reiterado pedido de que apague su cigarrillo a un metalero del público, menciona varias de sus excursiones musicales de los últimos años, incluyendo una colaboración con Quiet Riot, entre otras, para presentar «Crimson Warrior», tema de su banda Deathriders.

Acercándonos a la parte final de la lista, tres bombazos en la forma de «Panic» (fiesta total), «Deathrider» y «Metal Thrashing Mad» (devastadora versión) generaron toda la euforia que faltó en el comienzo. Las caras de felicidad y el pedido de «una más y no jodemos más» derivaron en una perlita llamada «Gung-Ho», otro clásico posterior de Anthrax con letra de Turbin. Tras esta vulgar demostración de poder, y con un Turbin que mantuvo su labor vocal en un buen nivel, el sentimiento reinante era de satisfacción; realmente era una noche para recordar ¿Cuántas veces hemos tenido la posibilidad de escuchar temas olvidados de las bandas más grandes de nuestro estilo? Recordemos que Anthrax en las últimas presentaciones en este país no ha sido de lo más generoso en cuánto a confección de setlists. Entonces, no suena loco pensar que realmente valió la pena ver a un ex integrante «robando» con el nombre de otra banda, que más que una curiosidad, fue una noche para venerar un disco por demás ninguneado incluso por la propia banda. Neil Turbin estuvo a la altura de la leyenda, Neil Turbin vino armado y peligroso.

Por Boris Bargas
PH: Martes Rubí
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AVIVANDO LA LLAMA ETERNA. Tributo V8 – El Teatrito (20-07-2024)

Sin dudas una banda que cambio a la música argentina fue V8. Desde su aparición marcó el comienzo de la historia del metal nacional impulsando a otras bandas, que con el correr de los años terminaron formando la escena. El legado que dejó V8 es innegable y es por eso que desde hace un tiempo atrás se viene haciendo un tributo a cargo del baterista y miembro fundador Gustavo Rowek. Si bien la banda pasó por varios cambios de formación la esencia siempre es la misma, rendir culto a la banda madre del metal argentino. Esta vez los encargados de llevar adelante la fiesta además de Rowek son Sergio Berdichevsky (ex Rata Blanca) en guitarra, Beto Ceriotti (ex Almafuerte) en bajo y Javier «Knario» Compiano (Plan 4) en voces. La cita, con bandas invitadas, se pactó en El Teatrito de microcentro el pasado 20 de julio siendo una excusa perfecta para celebrar el día de la amistad.

 

El encuentro arrancó a las 19 horas y una vez arribada la gente al lugar se pudo ver que el legado del heavy nacional se mantiene más que vivo con bandas como Viejas Runas, Gauchos del Infierno y Legionarios quienes se encargaron de abrir la noche con su música y talento dejando todo preparado para el evento principal. Cerca de las 21.30 las luces se apagaron y apareció lo que todos vinimos a ver: el tributo que inició con «Momento de Luchar» pegado a «La mano Maldita». Después, llego el saludo formal y presentación de la banda por parte de Knario que agradeció la oportunidad de estar allí con grandes referentes y dio la bienvenida a los fans de siempre y a los más jóvenes. La lista siguió «Ciega Ambición» para dar paso al primero de los más festejados de la noche: «Tiempos Metálicos» donde el público levantó más la energía que ya venía teniendo el show; un nivel que se mantuvo durante toda la velada por la arenga y movimientos constantes que mostró Knario el frontman de Plan 4. Para el turno de «Cautivos del Sistema» junto con «Parcas Sangrientas» el grito de heavy metal y su galope potente hizo que el teatrito tiemble.

A lo largo de la noche se pudo ver a la banda muy receptiva con la gente, como ya sabemos Knario es un showman por naturaleza quien en todo momento tuvo charla con el público presente pero además de ello, tanto Ceriotti, Berdichevsky como Rowek también se mostraron amables haciendo que toda la noche se sienta como una juntada con amigos más que un recital. Promediando la mitad sonaron «Ángeles en las Tinieblas» y «Si Puedes Vencer al Temor» momento con algunos problemas técnicos entre tema y tema en la guitarra de Berdichevsky. En cuanto al público, algo que se notó y fue un detalle muy lindo de ver fue que había presencia de niños acompañando a sus padres cantando las canciones de la banda demostrando que el legado va a seguir vivo en futuras generaciones. La velada continuó con «Ideando la Fuga» y «Lanzado al Mundo de Hoy» y aquí se anunció una rareza: «Voy a Enloquecer», un tema inédito de V8 solo disponible en el disco 1982/1987, un compilado de versiones únicas y en vivo del boxset Antología. Para la recta final, las canciones no necesitaban mucha presentación gracias a los acordes como anuncios. «Deseando Destruir y Matar» y «Brigadas Metálicas» primeras que recuerdan siempre que acá hay un lugar al que todos podemos ir y gritar con los puños y cuernos en alto. Pausa. Ceriotti se hizo a un costado y empezó a tirar unas notas en el bajo mientras miraba al público en complicidad, el resto de la banda preguntó qué le sucedía y fue entonces cuando Beto miro a Rowek para arrancar juntos los acordes de «Muy Cansado Estoy» donde se cantó con fuerza y se coreó cada parte de los arreglos de guitarra. Al finalizar, la banda agradeció y se retiró por un momento, las luces se apagaron, pero todos sabían que faltaba un solo tema y no solo uno, sino ESE tema. Ese que cualquier metalero argentino conoce y pide en un recital. Por eso, cuando volvieron a escena Knario hizo el pedido y fue así que sonaron los acordes de «Destrucción» siendo el tema que se cantó desde el comienzo hasta el final para cerrar un homenaje lleno de nostalgia y sentimiento. 

Las luces se prendieron, la banda saludó y una foto todos juntos. Knario baje del escenario y se saco fotos con los niños y luego foteando con el resto del público; siempre con buena predisposición, una sonrisa y una breve charla. La nueva formación de este tributo, al igual que las anteriores, le puso su propia impronta a canciones clásicas y aunque quizá vengan de estilos diferentes sabemos que el sentimiento hacia V8 es el mismo, que no conoce de géneros, no conoce de edades ni de lazos. Lo único que conoce es que el grito del metal siempre está en el aire junto a la imponente furia del motor, esa que pide el fin de los inicuos, siempre con un paso más en la batalla y siempre luchando por el metal. ¿Queda alguna duda? No, V8, no murió.

Por Fernando Gonzalez

 




DOGMA ANUNCIA SIDE SHOW EN UNICLUB

Dogma surge como una sirena mitológica que llama a todos los viajeros perdidos en los mares de la conformidad. Este enigmático grupo, conformado por Lilith (voz), Lamia (guitarra), Nixe (bajo) y Abrahel (batería), mezcla el hard rock y el metal para crear una experiencia musical única y provocadora.

Dogma no es solo una banda; es una filosofía de vida, un culto al individualismo y a la rebelión contra la opresión de las normas sociales y religiosas. Adoptando los nombres de entidades femeninas poderosas de diversas culturas antiguas, Dogma desafía las expectativas y subvierte las imágenes tradicionales con teatralidad y música contundente.

Su álbum homónimo, lanzado en noviembre de 2023 a través de MNRK Heavy (antes eOne), presenta himnos de rebeldía cargados de grandes riffs y ritmos que invitan a una liberación carnal y espiritual. Temas como “Forbidden Zone”, “Carnal Liberation” y “Made Her Mine” han capturado la atención de los críticos y fans por igual, consolidando a Dogma como una fuerza imparable en la escena musical.

Dogma ha sido destacado en importantes publicaciones impresas como Classic Rock Magazine, Metal Hammer y Revolver. La banda fue incluida en la lista de “5 Badass Rising Bands You Need To Know” de Revolver y su canción “My First Peak” fue nombrada como una de las “6 Best New Songs Right Now” por la misma revista, además de ser nominada como la canción de metal del año. También fueron reconocidos en la sección “Spot On” de Metal Hammer.

Tras una gira sudamericana junto a la banda italiana Wind Rose, Dogma anuncia un show en solitario en Buenos Aires. El mismo tendrá lugar el domingo 28 de julio en Uniclub (Guardia Vieja 3360, C.A.B.A.). Como banda invitada se estarán presentando los locales Bloodparade.

Las entradas anticipadas ya se encuentran a la venta a través de sistema Al Pogo

 























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